El estado de las masas vegetales en las calles Voces Ceibes y Río da Cova, situadas medio kilómetro arriba del centro de Vilaboa, y las reiteradas quejas de los vecinos, cuyo inicio se remonta a 2007, aseguran, han movilizado a la Valedora do Pobo y a la Xunta. La Consellería de Medio Rural ha abierto diligencias, aún sin cerrar, y la defensora autonómica ha admitido la queja enviada por residentes. Ambos organismos han requerido explicaciones al Concello de Culleredo, que no había respondido a las denuncias vecinales. Preguntado por este diario, asegura que los servicios técnicos municipales tienen constancia del problema y que “se encuentra en trámite”.
Los vecinos advierten de que “el estado de las masas forestales, aceras y aledaños de las viviendas” de la zona entraña riesgo de incendios. Aseguran que desde 2007 han remitido escritos, algunos avalados por una docena de firmas, informando de la situación al Ayuntamiento, sin obtener respuesta y sin que actuase.
La Valedora do Pobo admitió la queja remitida por uno de los vecinos el pasado mes de abril. En consecuencia, inició las actuaciones oportunas ante el Concello de Culleredo, que consistieron en requerirle que en el plazo de 15 días facilitase información sobre los problemas denunciados. El Ayuntamiento aseguró ayer que ya ha dado respuesta a la Valedora en ese sentido y que espera “tener solución en todos los terrenos que se encuentren en el ámbito de las redes secundarias de las fajas de gestión” en las dos calles.
La Consellería de Medio Rural, por su parte, abrió diligencias en agosto del año pasado. El departamento autonómico comunicó al vecino firmante de la queja que se le envió que había remitido la denuncia al Ayuntamiento, “ya que es de su competencia la realización de las actuaciones necesarias para su tramitación, consistentes en la comprobación de los hechos y de, existir infracción, requerir a los propietarios a cumplir las obligaciones que señala la ley”, resolvió en el escrito en el que le comunicaba la apertura de diligencias previas.
Los vecinos lamentan la “aberrante falta de cuidado e interés en las peticiones de los convecinos”. En plena ola de incendios en España, y en Galicia, los vecinos aseguran sentir miedo de que se produzca un incendio y la vegetación incontrolada en entorno de sus casas provoque una desgracia. Los residentes en la zona recuerdan que “las franjas forestales y el tratamiento de la biomasa” son competencia del Concello, de acuerdo a la ley.
