La Opinión de A Coruña

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Los padres de una niña atropellada en Fiobre reúnen 750 firmas para exigir un paso seguro

Todos los partidos de Bergondo se unen para exigir un radar o un paso peatonal junto a la parada del bus escolar | Los vecinos amenazan con cortes de tráfico si no se toman medidas

Tramo de la AC-164 a su paso por Fiobre, a la altura de una marquesina de bus. | // LA OPINIÓN

Los padres de una niña de once años que padece daños neurológicos severos como consecuencia de un atropello junto a la parada del bus escolar de Fiobre han puesto en marcha una campaña de recogida de firmas a través de change.org para exigir mejoras en la seguridad en la AC-164 a su paso por este núcleo bergondés. En un par de semanas, su reclamación de un control de velocidad de tráfico y un paso seguro ha reunido ya 744 rúbricas.

La demanda no es nueva. Se trata de una reivindicación compartida por la Corporación local al completo y por los residentes en este núcleo bergondés, que han reclamado en numerosas ocasiones un paso seguro en un tramo muy transitado por la presencia en las inmediaciones de un parque infantil, un parque biosaludable y tres paradas de bus, una de ellas, escolar, como advierten los promotores de la recogida de vistas.

Los vecinos reúnen también firmas casa a casa y, de no tomarse medidas, amenazan con protestas, cortes de tráfico incluidos. La Xunta se ha negado hasta ahora a habilitar un paso peatonal en este punto alegando que “no se dan las condiciones”, según explica el Concello.

La mejora de la seguridad vial en este punto fue objeto de una moción de Alternativa dos Veciños que prosperó transformada en declaración institucional. Todos los partidos con representación en el Concello bergondés, PSOE, Alternativa dos Veciños, PP y BNG, ven preciso adoptar medidas en este tramo, en el que, apuntan, se han registrado varios accidentes graves, y plantean a la Xunta varias alternativas, como instalar un paso de peatones regulado por semáforo frente a la marquesina o un radar fijo.

El aumento de la siniestralidad en este tramo ha sido corroborada por la Guardia Civil de Tráfico, que en un informe presentado en la junta de seguridad local apunta a la necesidad de mejorar la seguridad en este punto.

La Xunta solo ha accedido de momento a rebajar el límite máximo de velocidad de 60 a 50 kilómetros por hora, el reglamentario para el paso por núcleos de población, pero este cambio no se ha visto acompañado de una nueva señalización, lamentan desde el Concello bergondés que considera, además, insuficiente esta medida.

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