Opinión | Artículos de broma

Tamtam de ‘boom’

Si hacemos caso al tamtam pronto oiremos boom. Boom del carillón de bombardeos rusos que suena en Kiev, Járkov, Mariupol, Odesa y otras ciudades ucranianas. La geografía sitúa a España en retaguardia para los tanques, pero a tiro de misil nuclear ruso. Tamtam. La ministra de Defensa, Margarita Robles, instó a que no se baje la guardia frente a Rusia, por el riesgo de que lance un ataque contra la OTAN, organización militar de auxilios mutuos y ataque conjunto. Eso tiene sinviviendo a letones, lituanos, polacos, noruegos y finlandeses, lindantes 2.500 kilómetros con el enemigo. A España la acercaron 3.000 kilómetros al frente de guerra 6 ampliaciones de la OTAN desde la reunificación de Alemania, posterior a nuestra entrada. La OTAN y Rusia están pecho contra pecho, mirándose fijamente a los ojos, mientras se dan patadas en la Ucrania.

Tamtam. En Alemania, Bild filtró hace un mes un documento de su ministerio de Defensa en el que se prepara para una posible y próxima guerra total europea. Tamtam. En Suecia, pendiente de entrar en la OTAN, el ministro de Defensa Civil advirtió a sus conciudadanos de que el país podría enfrentarse pronto a una guerra con Rusia. Tamtam. Nadia Calviño, presidenta del Banco Europeo de Inversiones, sugiere a la UE que “debemos reforzar a la industria europea de defensa y nuestra capacidad disuasoria”. En dinero, el 2% del Producto Interior Bruto para armarse. Tamtam. Después de reunir a 27 líderes y ministros de la UE y la OTAN el presidente de Francia, Enmanuel Macron, avisó de que “hay que prepararse para un ataque de Rusia” y no excluye enviar tropas a Ucrania “para que no pueda ganar esta guerra”. Da motivos activos y pasivos para subir la factura militar.

Todo esto, que suena a guerra, forma parte de la paz porque es disuasión y amenaza. Lo difícil es saber si el tamtam suena para que nuestro miedo ayude a la industria bélica o para que nuestra fuerza bélica dé miedo a Rusia, si es preciso nuestro insomnio para desvelar a Putin, si los nuestros nos tratan como al enemigo.

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