Vuelven las horas de playa, el sol y el calor y con ello, la necesidad de que la crema solar se convierte en un imprescindible en nuestro día a día. Si bien se recomienda utilizar crema solar todos los días del año, durante el verano su uso debe ser más continuado.

Es fundamental cuidar nuestra piel de las radiaciones solares y para ello es fundamental escoger un buen protector. A la hora de elegir una crema solar, existen varios puntos importantes a tener en cuenta, como que sean de amplio espectro o que en su listado de ingredientes no incluyan nanopartículas filtros sintéticos peligrosos para la salud y el medio ambiente.

Las cremas solares con filtros minerales o físicos, suelen estar hechas a base de nanopartículas de minerales como el óxido de zinc y el dióxido de titanio, productos que si penetran en nuestra piel, pueden llegar a ser dañinos, sobre todo el segundo.

En los productos de cosmética está permitido su uso. De hecho el Comité Científico de Seguridad de los Consumidores (CCSC) confirmó que las nanopartículas de este mineral, utilizadas en concentraciones de hasta un 25% como filtro UV en protectores solares, pueden considerarse seguras al aplicarse tanto en pieles sanas como quemadas por el sol pero a la hora de elegir un protector solar con filtro mineral, deberemos mirar con lupa la lista de ingredientes.

Si encontramos la palabra "nano" al lado de los ingredientes antes mencionados (óxido de titanio o de zinc), será mejor que optemos por otra crema protectora.

Filtros químicos a evitar

Cuando analicemos los ingredientes de este tipo de protectores solares, debemos evitar que contengan los siguientes filtros que encontramos en un listado elaborado por 'Ecologistas en Acción':

  • Metoxicinamato de etilhexilo
  • Benzofenona-3
  • Ciclopentasiloxano
  • Ciclohexasiloxano
  • Butilhidroxitolueno (BHT)
  • Butylphenyl methyl propiona
  • Ácido salicílico
  • Parabenos