La Policía Nacional ha culminado la segunda fase de la operación desarrollada la semana pasada contra una red de explotación sexual de hombres de origen brasileño y ha detenido a otras cinco personas en tres prostíbulos masculinos de Madrid.

Los investigadores comprobaron que los hombres permanecían en cada local unos 21 días y disponibles las 24 horas para los clientes. Los responsables de la red se llevaban el 50% de las ganancias y les hacían firmar un contrato de alquiler de habitación para aparentar que estaban allí de forma voluntaria.