¿Qué haría si con 80 años de edad descubre que la persona en la que más confiaba ha vaciado su cuenta corriente o ha vendido sus propiedades? El número de ancianos estafados por familiares o amigos se ha duplicado en los últimos meses. Solo en el Instituto Europeo Campus Stellae reciben ahora un par de consultas al mes en busca de asesoramiento y tratamiento psicológico para sobrellevar el trauma.

Como explica Nuria Pereira, directora del instituto y perito grafólogo, esos estafadores "condenan a muchos ancianos a vivir en la miseria en los últimos días de su vida, ya que a muchos les saquean hasta el dinero destinado a pagar sus residencias". Pero el perfil del estafador no es el de alguien necesitado, sino de clase media. Por eso Pereira cree que la situación no tiene que ver con la crisis económica, sino "de valores", a juego con el clima de "impunidad" de la actualidad.

Los mecanismos de estafa, aparte de la cotitularidad de una cuenta para vaciarla, son la firma en documentos en blanco luego rellenados por el estafador o la firma de documentos cuando la persona no es consciente, por la medicación, o padece un trastorno cognitivo. En algunos casos, señala, los familiares recurren a la coacción y al maltrato.