La socióloga holandesa Saskia Sassen experta en asuntos urbanos y globalización, obtuvo ayer el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2013, al imponerse en la última votación del jurado al economista norteamericano Paul Romer. Ambos habían sido seleccionados por el jurado de entre las 26 candidaturas que optaban a este galardón, que en sus 33 años de historia sólo ha sido conseguido por otras dos mujeres: la filósofa estadounidense Martha Nussbaum, en la pasada edición, y la expresidenta irlandesa Mary Robinson, en 2006.

Impulsora del concepto de ciudad global, actualmente aceptado y utilizado en todo el mundo, Saskia Sassen es una de las sociólogas de mayor prestigio internacional en el campo de la globalización y las estrategias urbanas. Así lo puso de manifiesto el jurado en su fallo, al destacar su contribución "a la sociología urbana y al análisis de las dimensiones social, económica y política de la globalización".

El acta, hecha pública por el presidente del jurado, el jurista y exministro Aurelio Menéndez, destaca, también, la dimensión internacional de sus ideas, sus estudios sobre las migraciones y el papel de las grandes ciudades en la dirección de la economía internacional y el concepto ciudad global, una de sus mayores aportaciones, "actualmente aceptado y empleado en todas las ciencias sociales".

"Para Sassen, las ciudades globales forman redes que concentran el poder de decisión y nuevas relaciones entre territorio, autoridad y derechos, diluyendo así el papel de las fronteras", refleja el acta del jurado, que incide en que también son "generadoras de grandes desigualdades y segregación social debido, entre otras causas, a las diferencias en el acceso a las tecnologías de la información".

Sassen, la única mujer que aparece entre los diez primeros científicos sociales del mundo, cuenta entre sus publicaciones con La ciudad global (1991), una de sus grandes aportaciones. Según su teoría, desde las áreas metropolitanas, que concentran el poder económico, financiero y de telecomunicaciones, se ejerce el control y la dirección de la economía mundial, y en ellas se ubican los principales centros de poder mundial en los que se genera información vital para la toma de decisiones de alto nivel.