El alcalde de Becerreá, Manuel Martínez, pidió ayer "disculpas" a la auxiliar de enfermería que superó el ébola, Teresa Romero, por no haber podido recabar los apoyos necesarios para nombrarla hija adoptiva de la localidad y haber dado por aprobado el acuerdo, votado el pasado jueves, cuando se necesitaba una mayoría absoluta de apoyos.

La corporación local debatió la propuesta para declarar a Teresa Romero hija adoptiva en el pleno del jueves, una iniciativa que fue apoyada por los cinco concejales socialistas, mientras que populares y nacionalistas -que suman seis ediles- se abstuvieron. En un principio, la corporación dio por aprobado este acuerdo, dado que la ley exige una mayoría simple. Sin embargo, la ordenanza de honores del propio municipio, del año 2003, exige que este tipo de acuerdos se adopten por mayoría absoluta o por dos tercios de la corporación, por lo que sería necesario un voto adicional para darlo por válido.

A juicio del regidor, no concederle este título, en base "al coraje, la entereza, la valentía y la dignidad de Teresa Romero", es "una falta de respeto total y absoluta", sobre todo teniendo en cuenta que se ha conocido que la auxiliar donará su plasma a un enfermo en Italia. "Está dispuesta a colaborar no solo con los médicos de éste país, sino de toda Europa o de aquellos que se lo soliciten. Esta solidaridad merecía que el pueblo de Becerreá estuviera a la altura de las circunstancias y no ha sido así porqué el BNG y el PP, con extraños intereses electorales, se opusieron", lamentó el alcalde, al tiempo que criticó que la oposición emplee este hecho como "arma arrojadiza". No obstante, Martínez dejó la puerta abierta a buscar una "mejor ocasión" para alcanzar este acuerdo, en un momento en el que "impere el sentido común".

Por otra parte, la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, destacó ayer el "buen funcionamiento del sistema sanitario" con los posibles afectados por el virus del ébola que permanecieron controlados en cuarentena, así como con Teresa Romero, que "ha permitido que haya salido con las menores secuelas posibles". Mosquera subrayó las "condiciones muy especiales" que se dieron en el caso de la auxiliar de enfermería gallega que "afortunadamente ha tenido una atención fantástica".

Preguntada por la demanda que interpondrá contra Teresa Romero la médico que la atendió en el centro de salud de Alcorcón y que asegura no haber sido informada durante la consulta de que la auxiliar de enfermería había tenido contacto con personas con ébola, la titular de Sanidade prefirió "no entrar" en este asunto. Un tema sobre el que sí opinó el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, quien ve "razonable" la denuncia para defender su "honorabilidad y profesionalidad". "Sorprendentemente, Teresa Romero ha cambiado esa versión que había dicho en varias ocasiones y no es que haya mentido solo, sino que ha hecho una cosa muy grave: imputar a la médico de Primaria una actuación que desde el punto de vista profesional sería muy negligente", señaló ayer el presidente madrileño.