En torno a medio millar de personas se manifestaron ayer en A Coruña contra el cierre del Centro Público Integral (CPI) Monte Caxado de As Pontes y pidieron diálogo a la Xunta para alcanzar medidas de racionalización consensuadas. Encabezados por un camión de bomberos de esa localidad eumesa, con las sirenas activadas, medio millar de personas, según la Policía Local, marcharon entre el Coliseum y la Delegación Territorial de la Xunta en la ciudad, donde se concentraron durante cerca de una hora. La manifestación estuvo encabezada por una pancarta con el lema Non ó peche do Monte Caxado. Non á unificación de centros.
Al grito de "Manos arriba, esto es un atraco" y "é unha vergoña que pechen unha escola", los manifestantes, entre los que estuvieron varios alcaldes del área de Ferrol, demandaron una rectificación a la decisión del Gobierno autonómico, que también afecta a centros de Outes, O Porriño (Pontevedra) y Rivadavia (Ourense).
El presidente de la Diputación de A Coruña y alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso, explicó, como un manifestante más, las reclamaciones de las familias de la localidad. "Lo que queremos es que quien tiene que ordenar la política educativa de este país, que es la Consellería de Educación, se siente a hablar, a dialogar con la comunidad educativa", declaró González Formoso, quien espera que Educación dé "las explicaciones pertinentes", e ironizó con la terminología utilizada por el Ejecutivo autonómico: "No es un cierre, es una extinción, ahí sí que estamos de acuerdo, pero lo que queremos es que no se extinga y que se consensúen las medidas de racionalización", continuó. "No somos locos -agregó-, no somos radicales, somos gente normal. Lo único que pretendemos es que nos expliquen qué van a hacer en el ámbito que más nos duele a todos, que es el de nuestros hijos", añadió.
El cierre incumbe a 463 familias, de las que 56 están afectadas por necesidades especiales, y se decretó "el 22 de junio en el Diario Oficial de Galicia ( DOG) sin dar más explicaciones a la gente", una decisión censurada por González Formoso, quien consideró que la Xunta no actuó de forma correcta.
Comparecencia de Rodríguez
Por otro lado, una representación de madres y profesoras de los centros Monte Caxado y Emilio Navasqües, de As Pontes y Outes, se mostraron "ofendidos" tras la comparecencia del conselleiro de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, Román Rodríguez, acusando a su departamento de tomar esta decisión sin consultar con la comunidad educativa.
La profesora Sara Álvarez , del centro de As Pontes, reiteró que el CPI "se extingue", trasladando insatisfacción por las explicaciones del conselleiro del ramo, que "insiste" en que no existe un cierre". "Pero no es verdad", matizó, insistiendo en que "no se han puesto en contacto" con los docentes de los centros afectados por la reordenación para estudiar los pasos a seguir. "Las familais están tan enfadadas porque no se ha contado con ellas", reiteró.
