News Media Europe (NME) mostró ayer su rechazo enérgico y su más firme condena a los registros policiales que tuvieron lugar este pasado martes en la sede de la agencia de noticias Europa Press en Baleares y en el periódico Diario de Mallorca, con el objetivo de requisar documentación, móviles personales y materiales corporativos en el marco de la operación Cursach.
La Asociación Europea de Editores -que aglutina más de 2.200 medios de información de todo el continente europeo-, condenó lo que supone un claro ataque contra los derechos fundamentales de la libertad de expresión y de la libertad de los medios de información.
Protección de las fuentes
Asimismo, News Media Europe recordó ayer a las autoridades policiales y judiciales que no pueden obtener información confidencial de los profesionales de los medios de comunicación que ejercen su labor bajo el amparo del derecho fundamental a proteger sus fuentes.