Ni los tomates, ni los aguacates, ni las zanahorias ni el maíz que consumimos actualmente tienen apenas que ver con los que había hace un par de siglos. Hoy disfrutamos frutas y hortalizas carnosas y nutritivas gracias a la mejora genética de estos cultivos vegetales, una labor que, entre otros trabajos de investigación, ejerce la Misión Biológica de Galicia (MBG), que hoy cumple 100 años.

Fundada en 1921 por la Junta de Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE), una institución que tuvo un papel muy relevante en el desarrollo científico y cultural de España hasta su desaparición en 1936, la MBG es, junto con el Instituto Cajal, una de las entidades de investigación más antiguas del Centro Superior de Investigaciones científicas (CSIC), en el que se integró en 1939.

Como informa el CSIC en una nota, la Misión Biológica de Galicia fue creada bajo el reinado de Alfonso XIII con el objetivo de realizar investigaciones y trabajos de biología aplicados a la agricultura y ganadería de Galicia. Durante sus primeros años se centró en la obtención de variedades vegetales y de ganado porcino de calidad, así como en la transmisión de dichos conocimientos al sector agrario.

A partir de 1930, sus trabajos se enfocaron en la mejora genética del maíz y en la obtención de variedades de castaño resistentes a la tinta (producida por un hongo, una de sus principales plagas y enfermedades), así como en la mejora y difusión en toda España del cerdo inglés Large White.

Las investigaciones sobre mejora genética vegetal y animal y fisiología continuaron en las décadas de 1940 y 1950, y a partir de 1980 se amplió personal y líneas de investigación para mejorar los cultivos de la vid y las legumbres.

En 2008 se inició otra línea de investigación, la genética forestal. Actualmente la MBG cuenta con 8 grupos centrados en la investigación agraria y forestal, y se ocupa de los principales cultivos de la comunidad gallega (maíz, leguminosas y brásicas), así como de especies leñosas (vid, olivo, pinos y robles).

Un siglo después de su creación, la Misión Biológica de Galicia investiga para hacer más sostenible la agricultura y silvicultura gallegas, mejorando su resistencia, productividad y calidad. El CSIC prevé desarrollar un programa de actividades, dirigido al público general, con el objetivo de acercar la MBG a la sociedad.