La variante británica del coronavirus ya se propagaba en 15 países en noviembre de 2020 y por Estados Unidos lo hacía ya en octubre, según un estudio del Consorcio de Modelado COVID-19 de la Universidad de Texas en Austin (EEUU) publicado en la revista Emerging Infectious Diseases. Los científicos descubrieron esta variante por primera vez a principios de diciembre en el Reino Unido, si bien se cree que se había extendido por todo el mundo sin ser detectada durante meses.

Al analizar datos de 15 países, calcularon la posibilidad de que los viajeros del Reino Unido introdujeran la variante en ellos entre septiembre y diciembre y descubrieron que es probable que la cepa ya circulase por ellos en noviembre.