Personalidades de la sociedad civil y política despiden a Ceferino de Blas
Decenas de personas arropan a la familia del exdirector del ‘Faro de Vigo’, fallecido el pasado fin de semana
Ágatha de Santos
El día amaneció nublado, plomizo, tanto como los ánimos de quienes ayer se acercaron hasta la iglesia de Santiago de Vigo para despedir al exdirector de Faro de Vigo, del mismo grupo editorial que este diario, y cronista oficial de la ciudad olívica Ceferino de Blas, fallecido en la madrugada del sábado. El oficio religioso reunió a políticos de todos los colores y a representantes de todos los ámbitos sociales. Vigo despedía así a un hombre bueno, justo y que amó profundamente la ciudad que lo adoptó. Se fue un periodista de raza y un intelectual que deja un vasto legado. Así lo aseguró monseñor Alberto Cuevas, delegado de Comunicación de la Diócesis de Tui-Vigo, que ofició el funeral. Monseñor Cuevas habló desde el afecto que sentía por el periodista, que, recordó, durante un tiempo desempeñó también el ministerio del sacerdocio con la misma coherencia con la que desempeñó su faceta de comunicador.
Entre los asistentes se encontraban Alfonso Rueda, presidente de la Xunta; Miguel Santalices, presidente del Parlamento de Galicia, y su esposa, Teresa Cendón; Julio García Comesaña, conselleiro de Sanidade; Marta Fernández-Tapias, delegada territorial de la Xunta en Vigo, y su antecesor, Ignacio López Chaves; los exalcaldes de Vigo Lois Pérez Castrillo (BNG) y Corina Porro (PP); y el alcalde de la ciudad, Abel Caballero; Carmela Silva, presidenta de la Diputación de Pontevedra; Nidia Arévalo, alcaldesa de Mos; y David Regades, delegado de la Zona Franca Vigo, y su predecesor Francisco López Peña.
La gran familia de Faro de Vigo, del grupo editorial Prensa Ibérica, al que pertenece LA OPINIÓN, también quiso dar su último adiós a De Blas y estar cerca de su familia en estos momentos difíciles, encabezada por el presidente de Editorial Prensa Ibérica (EPI), Javier Moll, quien leyó un pasaje de la Biblia; la vicepresidenta, Arantza Sarasola; el director general del grupo en Galicia, Jesús Echevarría; el director general de contenidos de EPI, Isidoro Nicieza; el subdirector general del grupo en Galicia, Juan Carlos Da Silva; y el gerente general de EPI en Galicia, Jaime Abella. También estuvieron exdirectores de La Nueva España, periódico que pertenece al mismo grupo editorial, como José Manuel Vaquero y Melchor Fernández, así como numerosos periodistas con los que Ceferino De Blas trabajó en el diario decano.
Asimismo, numerosas personalidades de la sociedad y la cultura viguesa y gallega se dieron cita en el templo para despedirse del periodista finado, entre estos, sus compañeros del Instituto de Estudios Vigueses; el artista Antón Pulido; el editor y escritor Manuel Bragado; José María Fonseca Moretón, presidente del Grupo Terras Gauda; Alfonso Cabaleiro, del Consejo de Administración de la CRTVG; Julio Rodríguez, director de Atlántico Diario; y Eugenio González de Haz y Vizcaíno, presidente del Grupo Radio Vigo.
Monseñor Cuevas pidió al Señor fuerzas para encajar la triste noticia de una pérdida que fue “como el frío de una hoja en las entrañas”, dijo, parafraseando uno de los artículos publicados estos días con motivo del deceso. “Se agrandará con el tiempo la estela que nos deja Ceferino”, aseguró.
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