Isabel San Sebastián analizará en A Coruña la literatura asociada al Camino de Santiago

El Camino de Santiago, el primer itinerario cultural europeo, nunca ha sido solo una ruta. En su gestación, en tiempos del monarca asturiano Alfonso II, El Casto, se imbricaron estímulos religiosos, políticos, territoriales y sociales. Y en torno a esta vía santa que circula por la frontera entre la historia y la leyenda pronto comenzaron a florecer canciones, testimonios y narraciones, hasta componer, en estos doce siglos de existencia, una imponente bibliografía.

La literatura en el Camino centra la conferencia que este próximo martes, 13 de junio, impartirá la escritora y periodista Isabel San Sebastián en A Coruña, en el salón de actos del Centro Fonseca (calle Fonseca, 6) a partir de las 19.30 horas, con entrada gratuita hasta completar aforo. El encuentro, organizado por LA OPINIÓN, forma parte del ciclo Oviedo, como Origen del Camino, que ha impulsado el periódico La Nueva España (del mismo grupo editorial que LA OPINIÓN) en colaboración con el Ayuntamiento de Oviedo. Un ciclo con el que se trata de poner en valor el papel jugado por la Monarquía Asturiana en la creación y consolidación del Camino de Santiago. Y también reivindicar ese Camino Primitivo que, según la tradición, inauguró el propio Alfonso II cuando acudió, en aquel lejano siglo IX, desde la capital de su reino, en Oviedo, hasta el bosque de Libredón, en el extremo más occidental de sus posesiones, para contemplar los restos de Santiago, tras ser informado por el obispo Teodomiro del milagroso hallazgo.

Para bucear en la riquísima literatura vinculada al Camino de Santiago, no hay guía más apropiado que Isabel San Sebastián. Comunicadora de reconocido prestigio, la periodista y escritora ha cosechado gran éxito con sus novelas de temática histórica, en algunas de las cuales ha trenzado perspicaces tramas en torno a la creación y consolidación de la vía santa. Ese el caso de La peregrina, en la que Isabel San Sebastián sitúa a su protagonista, Alana, en la misma comitiva que, con Alfonso II al frente, unió por vez primera Oviedo y el lugar en el que se hallaron los restos de Santiago. La vía santa tendría protagonismo también en su siguiente novela, Las campanas de Santiago, ambientada en el año 997, en plena ofensiva de Almanzor para saquear y destruir Santiago de Compostela.