España se suma a la alianza mundial para frenar la extracción de petróleo y el gas

Más de una veintena de países se han incorporado al pacto dos años después de su lanzamiento u “Es un paso en la dirección correcta”, asegura Greenpeace España

Participantes en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, en Dubái.  | // AMR ALFIKY

Participantes en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, en Dubái. | // AMR ALFIKY / Valentina Raffio

Valentina Raffio

La alianza internacional para frenar la extracción de petróleo y gas acaba de sumar a España entre sus filas. Según anunciaron los responsables de esta iniciativa en el sexto día de la cumbre del clima de Dubái (COP28), dos años después de su lanzamiento, este pacto ya ha conseguido sumar el apoyo de 24 países de todo el mundo. La adhesión de España destaca entre las más celebradas. “En España hemos acordado triplicar la capacidad de energías renovables para 2030 y duplicar la eficiencia energética, pero nada de esto valdrá la pena si no abordamos la eliminación gradual de los combustibles fósiles”, afirmó la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica del Gobierno español, Teresa Ribera.

Este pacto internacional contra los combustibles fósiles, conocido como Beyond Oil and Gas Alliance (BOGA), se presentó hace dos años en la cumbre del clima de Glasgow (COP25), liderado por los gobiernos de Costa Rica y Dinamarca. Se trata de “la primera iniciativa diplomática del mundo centrada en mantener los combustibles fósiles en el suelo”. Los países adscritos a este compromiso se comprometen a “facilitar la eliminación controlada de la producción de petróleo y gas” y, por lo tanto, a frenar las nuevas licencias de exploración, a eliminar los subsidios públicos al petróleo y al gas y, en general, a aplicar medidas para reducir la dependencia de la energía fósil. Este compromiso ya ha sido respaldado por países como Francia, Portugal, Suecia, Nueva Zelanda, Italia y Finlandia, entre otros. Varias asociaciones filantrópicas se han sumado a esta iniciativa y han creado un fondo de 10 millones de dólares para poner en marcha algunas de las medidas previstas en este compromiso.

Según se anunció el mismo martes, Colombia y Kenia recibirán un medio millón de dólares cada una para “dejar atrás la dependencia del petróleo y el gas” y acelerar la transición hacia una economía más sostenible. La adhesión de España a esta iniciativa ha sido muy aplaudida por las entidades ecologistas. “Es un paso en la dirección correcta”, afirmó Pedro Zorrilla Miras, representante español en la delegación de Greenpeace. “Esperamos que esta iniciativa acelere la desconexión del gas y del petróleo en España con medidas más ambiciosas como, por ejemplo, fijar como objetivo que en 2030 hayamos abandonado definitivamente el gas para la producción de electricidad”, añadió el portavoz de esta entidad ecologista, quien espera que esta iniciativa sume cada vez más miembros.

En el sexto día oficial de la cumbre del clima de Dubái (COP28), ayer, también se anunció otros pactos para acelerar la transición energética para dejar atrás los combustibles fósiles y centrarse en las energías limpias. Emiratos Árabes Unidos, por ejemplo, anunció con entusiasmo su apoyo a la alianza global para abandonar el carbón. Estados Unidos también se sumó a este compromiso internacional, que también cuenta con la firma de países como España, Reino Unido, Alemania, Italia, Bélgica y México entre otros. Al menos ocho firmantes de este pacto se han comprometido a abandonar el carbón antes de 2025.

Todos los compromisos anunciados en estos días persiguen el mismo objetivo: hacer lo posible para limitar el calentamiento global a un máximo de 1,5ºC de media. Esta es la meta que persiguen desde un principio los impulsores de la cumbre de Dubái, que afirman estar trabajando en el “acuerdo más ambicioso desde París” para evitar la catástrofe climática. Por el momento, a falta de una semana para que finalice el encuentro, todo apunta a que los pasos van en la dirección correcta.