La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, destituyó ayer "por pérdida de confianza" a José Ángel Rivero, consejero delegado, y Jorge Rodrigo Domínguez, director gerente, de Madrid Espacios y Congresos, la empresa pública municipal que gestiona el Madrid Arena.
La decisión se produce tras conocerse la existencia de un documento que refiere "un compromiso de fidelización" firmado el 21 de septiembre por la dirección de Madrid Espacios y Congresos con la empresa Diviertt, por el que se establecían una serie de condiciones preferentes para la utilización del Madrid Arena en 2012 y 2013.
Ana Botella considera que "la ocultación de esta información supone una grave falta a la confianza depositada en ellos para desempeñar dichos puestos". Además, la alcaldesa reiteró "su compromiso de que se sepa absolutamente toda la verdad sobre lo que ocurrió en el Madrid Arena" y añadió que "no va a permitir que nadie falte a la verdad u oculte información".
La petición de cese se produce a pesar de que el Ayuntamiento expresó que "la mera existencia del documento no supone ninguna irregularidad. De hecho, Madrid Espacios y Congresos mantiene acuerdos de este tipo con distintas empresas desde hace años, como una fórmula para asegurar la contratación frecuente de sus instalaciones".
En el mismo comunicado, el Gobierno de Botella afirma que, "además, el acuerdo del 21 de septiembre con la empresa Diviertt suponía la renovación de un compromiso similar con esa misma empresa que existía desde el 2008". Desde el consistorio se indica que este documento, que "se ha considerado relevante para examinar los antecedentes de la gestión de la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, hasta ahora no se había puesto en conocimiento de la alcaldesa" ni tampoco de la delegada de Hacienda, Concepción Dancausa, que ocupa la presidencia de Madrid Espacios y Congresos tras la dimisión el día 13 del hasta entonces delegado Pedro Calvo.
El propietario de la empresa Kontrol 34, Carlos Manzanares Rodríguez, se desvinculó ayer ante el juez de las labores de seguridad en la fiesta de Halloween en el recinto del Madrid Arena, en la que murieron cuatro jóvenes.
Libertad sin cargos
El titular del Juzgado número 51 de Madrid, Eduardo López Palop, que investiga el caso, dejó en libertad sin cargos al propietario de Kontrol 34, que en la documentación aportada por Madrid Espacios y Congresos figura como responsable del control de los accesos y la seguridad en el interior del recinto, después de tomarle declaración como imputado durante dos horas.
Manzanares Rodríguez eludió a los medios de comunicación entrando y saliendo de la sede de los juzgados con unas gafas y un casco para evitar ser reconocido. A la salida, su abogado, Óskar Zein, ha subrayado que la empresa responsable de la seguridad dentro y fuera del recinto es Seguriber, contratada por la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos.
Zein ha explicado que Kontrol 34 ofreció a la empresa organizadora del evento, Diviertt, un listado de personas a las que se les exigía el carné de controlador de acceso, y, a partir de ese momento, Diviertt las contrató para que desarrollaran la función de auxiliares.
Los letrados de las acusaciones particulares pedirán una ampliación de las imputaciones, que tienen pendientes de concretar, aunque no han descartado las de representantes de Madrid Espacios y Congresos, y del ayuntamiento, como el vicealcalde Miguel Ángel Villanueva, el delegado de Seguridad y el jefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo.
Entre las próximas diligencias, mañana está previsto un recuento de las entradas en la Brigada de Homicidios y el 11 de diciembre la declaración ante el juez del representante de Seguriber. Este último es el tercer imputado por ahora en la causa, tras Miguel Ángel Flores, gerente de la organizadora Diviertt, y Carlos Manzanares Rodríguez.
