La española Reyes García-Pellón, acusada de apuñalar a su marido, eludió su derecho a presentar alegaciones ante el juzgado del condado de Delaware y permitir así que continúen los exámenes psiquiátricos a los que se somete. Su abogada, Kathy Labrum, guió a García-Pellón durante el breve proceso y explicó que tratará de demostrar que la española, de 52 años, tiene problemas mentales que la incapacitan para someterse a juicio.

"Los exámenes psiquiátricos continuarán y el 28 de marzo volverá a comparecer para escuchar los cargos formales que se le presentan", afirmó Labrum a Efe tras concluir la audiencia preliminar.

En el tribunal, amigas de García-Pellón asistieron a la vista con lazos plateados, símbolo de los enfermos mentales, y saludaron emocionadas a la acusada. García-Pellón apareció ante el juez esposada y visiblemente abatida, y dijo un tímido "gracias" a sus amigas, algunas de ellas incapaces de contener las lágrimas.