Un vecino de Lugo fue detenido ayer por la Guardia Civil acusado de la desaparición y posible muerte de su esposa. Esta mujer, M.L.J.J. natural del poblado de O Vao en Poio, es vecina de Lugo en donde residía con su marido y la familia de este desde que se casaron. Sin embargo, recientemente se había trasladado con su familia materna a la localidad pontevedresa de Figueirido, en concreto al domicilio de su hermana, debido a la mala relación que mantenía con su marido, ambos de etnia gitana.

El detenido habría confesado a última hora de ayer ante un juez de Lugo el crimen y que había enterrado el cadáver en un paraje de Teixeiro (Lugo) en donde una comisión judicial estaba intentando localizar el cuerpo sin vida de la mujer al cierre de esta edición.

La familia pontevedresa de la fallecida se presentó el domingo en las dependencias de la comandancia de Pontevedra denunciando el presunto secuestro por parte de su marido. Tal y como explicaron, el hombre se habría personado en Vilaboa (Pontevedra) y, según la denuncia, se la habría llevado "por la fuerza" de vuelta a Lugo con el objetivo de retomar su vida en común.

La preocupación entre los familiares de la mujer fue en aumento cuando ese mismo día recibieron una llamada del marido en la que les explicaba que se encontraba en una estación de servicio del área de Santiago de Compostela y que en un momento dado la mujer se había escapado y desconocía su paradero.

La Guardia Civil y la familia se temían lo peor y ayer calificaban esta desaparición como "de alto riesgo". Y es que, según fuentes de la delegación del Gobierno en Galicia, aunque a la desaparecida no le constan antecedentes de denuncias por violencia de género, sí se tiene conocimiento por terceras personas de que el año pasado pudo sufrir un episodio de malos tratos en el ámbito familiar.

En aquel entonces fue contactada por efectivos policiales para facilitar la presentación de una denuncia pero ella rechazó esta posibilidad, negando posibles episodios violentos.

Su marido fue detenido ayer por la mañana por efectivos de la Guardia Civil en Lugo. A última hora de la tarde el sospechoso participaba junto a los agentes y una comisión judicial en diferentes registros domiciliarios en la ciudad lucense, en concreto en el barrio de O Carqueixo donde residía. Unos registros que fueron autorizados por la titular del juzgado de instrucción 2 de Lugo, Estela San José, al tratarse del órgano especializado en asuntos de violencia de género.

Los investigadores creen que el detenido pudo haber acabado con la vida de su mujer y, de hecho, las últimas informaciones al cierre de esta edición indicaban que la Guardia Civil buscaba el cuerpo de la víctima en una zona cerca de la localidad lucense de Teixeiro. Distintas fuentes indicaban que pudo haber sido el propio detenido quien confesó los hechos durante los interrogatorios ante la titular del juzgado lucense.