El hombre detenido por la Guardia Civil tras dejar encerrado a su hijo de tres años en el coche mientras él se encontraba en el interior de un club de alterne declaró ante la titular del Juzgado 3 de Cangas que fue allí para buscar a un primo suyo que acaba de llegar de Rumanía y estaba "borracho". Aseguró que su primo no podía volver a casa por su embriaguez, y porque tampoco sabía el camino de vuelta, por eso lo llamó. Sostuvo que apenas estuvo diez minutos en el club de alterne, tiempo que necesitó para convencer a su primo de que había que marcharse.