El embajador griego en Brasil, Kyriakos Amiridis, desaparecido desde el lunes, pudo ser víctima de un crimen pasional, según informaron varios investigadores, aunque la hipótesis no fue confirmada por la Policía. En el coche del político apareció un cuerpo quemado y se encontró sangre en la casa que comparte con su esposa. Los investigadores entrevistaron a un policía y a la mujer, de quienes sospechan que mantienen una relación.