Aceptan hasta 4 años de prisión por los altercados contra el encarcelamiento de Hásel

Dos jóvenes acusados de participar en altercados durante una manifestación en Barcelona, en enero de 2021, para protestar por el encarcelamiento del rapero conocido como Pablo Hásel han aceptado penas de uno y cuatro años de prisión, respectivamente.

Los dos procesados han reconocido los hechos este miércoles ante la sección quinta de la Audiencia de Barcelona, después de que las partes hayan alcanzado un acuerdo, y el tribunal ha condenado a uno de ellos a cuatro años por atentado y desórdenes, y al otro a un año únicamente por el segundo delito.

La Fiscalía inicialmente pedía seis años de cárcel para uno de los procesados por los delitos agravados de atentado y desórdenes, mientras que para el otro acusado solicitaba tan solo un año de prisión solo por el segundo ilícito, la misma pena a la que finalmente ha sido condenado.

El tribunal también ha acordado para el acusado con la pena más baja la suspensión durante dos años, mientras que la defensa del otro procesado tiene intención de solicitar una extraordinaria, tras lo que la sala deberá decidir si también le permite eludir la cárcel.

Según el escrito de acusación del fiscal, el 30 de enero de 2021 se produjo una concentración no comunicada de apoyo al rapero Pablo Hásel, contra la decisión de la Audiencia Nacional de otorgarle diez días para ingresar en prisión tras ser condenado.

El ministerio público relata que la concentración, que comenzó inicialmente con cerca de 180 personas, que llegaron a ser 500 a lo largo del recorrido, llegó hasta las inmediaciones de la Delegación del Gobierno, donde algunos manifestantes comenzaron a lanzar objetos contra la policía y a quemar contenedores.

De acuerdo con la Fiscalía, uno de los acusados, en el momento de máxima afluencia de gente en la manifestación, lanzó una botella de cristal de cava contra la cabeza de un agente de los Mossos d'Esquadra, que no llegó a impactarle.

Después de haber fallado, según el escrito, el procesado realizó varios lanzamientos más contra el agente, que tuvo que resguardarse tras un furgón.

En cuanto al otro acusado, el ministerio público sostiene que volcó varios contenedores con el objetivo de obstaculizar el paso de vehículos policiales.