El laboratorio de biología y ADN que la Policía Nacional tiene en sus instalaciones de Lonzas crece "a una velocidad de vértigo", según el jefe superior de Policía de Galicia, Luis Manuel García Mañá. Desde su inauguración en el año 2008 resolvió 257 casos, la mayoría relacionados con asesinatos y agresiones sexuales, y duplicó su personal. "Hay que pensar que son asuntos de importancia", destaca García Mañá, al tiempo que advierte de que hay "riesgo" de que el laboratorio se "sature" con delitos de menor importancia.

Los profesionales que trabajan en las instalaciones situadas en A Coruña investigan cada año más delitos, por lo que la Policía Nacional dotó al laboratorio con robots y equipos, como los secuenciadores, de mayor capacidad. "Además de los casos nuevos, está obteniendo resultados sobre hechos antiguos que no estaban olvidados, pero sí archivados a la espera de tener elementos de comparación. Ha pasado el tiempo y ahora mismo se está haciendo la revisión de esos asuntos y se están obteniendo resultados", cuenta el jefe superior de Policía de Galicia, quien desvela que el laboratorio coruñés esclareció una agresión sexual que se había cometido en Alemania gracias a la ampliación de las bases de datos. El laboratorio de ADN coruñés intercambia documentos con policías de otros países, sobre todo europeos, lo que facilita las detenciones de sospechosos.

"En este momento en la base de datos tenemos controlados más de 130.000 perfiles genéticos de los cuales la mayor parte, 92.000 o más, la aporta el Cuerpo Nacional de Policía. Estamos viendo cómo está creciendo de una manera espectacular", subraya García Mañá, quien afirma que el año pasado en España se identificaron a más de 2.000 personas y se esclarecieron unos 2.500 asuntos gracias al empleo de técnicas relacionadas con el ADN forense. "Cerca de 200 fueron hechos que tienen que ver con agresiones sexuales, cerca de 150 fueron homicidios y algo más de una docena fueron asuntos de terrorismo", cuenta el responsable de la Policía Nacional en Galicia.

García Mañá destaca que aunque la huella convencional sigue utilizándose en las investigaciones criminales, la huella genética, es decir, el ADN, es "la gran novedad del siglo XXI", así como la huella que deja la voz. "La acústica forense también está creciendo", asegura el jefe superior del 091 en Galicia, quien recalca que en los últimos años se han dado "pasos de gigante" en materia de "aprovechamiento de las nuevas tecnologías" en las investigaciones policiales.

"No podíamos trabajar con técnicas del siglo XX, estamos ya en el siglo XXI. Han hecho que entendiéramos que la policía no puede ir por un lado y la universidad por otro. La ciencia tiene aplicación en la investigación criminal, de alguna manera todo aquello que hacen los científicos es aplicable en algún sentido a algunas de las investigaciones que nosotros desarrollamos", asegura el jefe superior de Policía de Galicia, Luis Manuel García Mañá, quien destaca que en las jornadas sobre la ciencia al servicio de la investigación que se inauguraron ayer en Caixa Galicia y que terminarán mañana participan "auténticos jugadores de la división de honor a nivel mundial".

El presidente de la Sociedad Internacional de Genética Forense, Ángel Carracedo Álvarez, impartirá hoy a las diez de la mañana la primera conferencia. En la jornada de hoy también participarán el jefe de grupo de infografía forense de la Comisaría General de Policía Científica, José Francisco Reñones; el profesor titular de Genética de la Universidad de A Coruña, Andrés Martínez Lage; y José Gómez Marín, experto policial en datiloscopia.