La Asociación de Empresarios de Hostelería de A Coruña emprendió hace casi año y medio un largo camino para conseguir que la Justicia anulase un acuerdo del Gobierno municipal por el que se impide la apertura de nuevos pubs en el Orzán, en las calles incluidas dentro de las zonas acústicamente saturadas (ZAS). El Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 4 ha rechazado su queja, sobre todo por una cuestión de forma y sin pararse a analizar el fondo. Los hosteleros ya han recurrido la sentencia.

La Junta de Gobierno Local se hizo eco en la sesión del pasado 7 de mayo de la desestimación del recurso presentado por la asociación de hostelería. El colectivo pretendía que se declarase nulo el acuerdo por el que se declaró ZAS al sector Orzán-Juan Canalejo. Sin embargo, el juez no admitió la denuncia de los hosteleros al entender que no existe un acuerdo previo del colectivo.

"Solo aporta poder general para pleitos, sin que haya aportado certificación de acuerdo alguno del órgano interno correspondiente de la referida asociación en el que se le autorice para la interposición del presente recurso (...), al no adjuntar certificación del secretario de la asociación que haga constar que fue autorizado por el órgano competente para interponer el presente recurso, podría llevarnos al absurdo de que el actor estuviera actuando en razón a su único interés y no en el de la asociación a quien representa", sostiene el juez de la sala de lo Contencioso-administrativo número 4 de A Coruña en la sentencia.

La abogada que representa los intereses de los hosteleros coruñeses considera que el fallo judicial sólo se centra en una "cuestión de forma", sin entrar a analizar las causas reales del decreto por el que el Ayuntamiento prohibió la apertura de nuevos locales de copas en el Orzán. La asociación ya ha interpuesto un recurso de apelación pero en cualquier caso, la letrada destaca que se ha presentado una segunda denuncia que está pendiente de resolverse.

El segundo recurso es del propietario de un pub, por lo que la asociación de hostelería considera que ahora los tribunales no pueden rechazar la causa por un problema de forma y que sí deberá adentrarse en las verdaderas causas de la orden municipal.

De nuevo ante el juez

La Junta de Gobierno Local también dio el pasado 7 de mayo el visto bueno para que los servicios jurídicos municipales se personen en el caso de que la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de A Coruña interponga un recurso de apelación, como al final sí se ha producido.

Los hosteleros acudieron a los tribunales al entender que la declaración ZAS para las calles de la movida nocturna juvenil en el Orzán debía llevarse a pleno -se aprobó en Junta de Gobierno Local el 21 de diciembre de 2007-. La asociación siempre ha criticado la decisión del Ayuntamiento coruñés. Según los empresarios, la pretensión del Gobierno municipal es provocar el cese de la actividad hostelera y no la reducción del ruido, principal argumento empleado desde María Pita para impedir la puesta en funcionamiento de nuevos pubs en las calles de este céntrico barrio.

El Ayuntamiento y los hosteleros no se ponen de acuerdo sobre el futuro de los locales de ocio nocturno en el barrio del Orzán. A la decisión municipal de impedir la puesta en funcionamiento de más pubs -que ha acabado en los tribunales- se une la convocatoria de ayudas para que los empresarios puedan cerrar sus negocios y cambiar de actividad comercial.

La asociación de hostelería aseguró -antes incluso de que el Ayuntamiento abriese el plazo para pedir subvenciones- que ningún empresario se acogería a dichas ayudas municipales. En abril, el Concello admitió que nadie había formalizado su solicitud, aunque el plazo concluye en julio. El problema que argumentan los hosteleros para dar la espalda a la iniciativa impulsada por la Concejalía de Urbanismo es sencilla: la cuantía de las subvenciones es insuficiente como para que algún empresario decida cerrar su pub, reformar el local y abrir un nuevo negocio.

El Ayuntamiento aprobó en diciembre del año pasado destinar 120.000 euros para el cambio de actividad en los pubs del Orzán. Cada empresario que decida abrir un nuevo negocio puede optar a una subvención de hasta 4.000 euros a fondo perdido y siempre que el importe de la ayuda no supere el 50% del coste total de la reforma. Los hosteleros ven esta medida "ilógica" y creen que sería más efectivo invertir el dinero en mejorar la insonorización de los pubs que todavía están abiertos.

Al nulo éxito de la subvención dirigida a los hosteleros hay que sumar la escasa participación de los vecinos del Orzán en las ayudas lanzadas por la Concejalía de Medio Ambiente para mitigar el problema del ruido en sus viviendas. El Concello se ha visto obligado a abrir una segunda convocatoria porque en la primera tan solo seis personas solicitaron acogerse a estas subvenciones municipales.