Las asociaciones de comerciantes de la ciudad estudian agruparse en un ente que las represente como un bloque para luchar por la supervivencia y la potenciación del pequeño comercio en la ciudad, sobre todo en asuntos "puntuales" que tengan que ver con la gestión municipal y en los que la federación provincial de comerciantes no tenga demasiado peso.

El presidente del área comercial de Matogrande y uno de los artífices de la idea, José Antonio Ferreira, asegura que esta asociación no es una escisión de la federación, sino que es un ente que se crea para solucionar de manera directa los problemas que atenazan a los comerciantes. "El otro día, estábamos en una reunión sobre el autobús turístico y otras cuestiones y salió el tema de crear una asociación que nos agrupase a las 16 áreas comerciales para que las negociaciones con el Ayuntamiento, por ejemplo, fuesen más rápidas", explica el presidente de la Zona Obelisco, Antonio Amor, que considera que las peticiones de las diferentes áreas serán atendidas de una manera más efectiva si están todas unidas.

"Los presidentes creemos que se puede hacer algo más, la federación es provincial y tiene que atender a los asuntos de todos los concellos y además tiene diferentes gremios. Esta asociación es para defender los intereses del pequeño comercio local, porque no puede seguir como está", dice el presidente de los empresarios de Matogrande, que considera que la ciudad que más comercio genera en la provincia y la que más está sufriendo los efectos de la crisis económica, tiene que recibir un trato especial de las instituciones."No se puede quedar como está", repite Ferreira, que apuesta por que la ciudad sea "más moderna" y que piense "más en el futuro" y que ese horizonte tenga en cuenta el desarrollo del pequeño comercio.

Los empresarios locales se reúnen cada mes para decidir las estrategias que seguirán para intentar potenciar sus negocios en el entramado de la ciudad. Cada una de las iniciativas que las áreas comerciales han desarrollado hasta ahora se integrarán en el día a día de la nueva asociación.

Uno de los temas que los comerciantes pretenden que se resuelva más rápido con la gestión conjunta es la de la instalación del alumbrado navideño, ya que una parte la financia el Ayuntamiento y, la otra, las tiendas de la zona. Algunos representantes de los comerciantes acudieron ya al Concello para tratar este tema, pero creen que, en épocas de crisis, los recursos existentes deben optimizarse.

"Tenemos que ver qué es lo que tiene cada uno y cuáles son los planes del Ayuntamiento para conseguir cubrir a todo el comercio", explica Antonio Amor. Y así lo decidieron en la reunión que mantuvieron ayer hasta las once de la noche. "Intentaremos compartir los arcos de luz que tenemos para que ninguna calle de la ciudad se quede a oscuras", explicó el presidente de Zona Obelisco orgulloso del encuentro mantenido. "Tenemos una idea para la asociación y hablamos de estatutos, pero aún hay mucho que pensar y más comerciantes que unirse", apuntó.

El dirigente del Área Comercial Obelisco, Tonecho Amor, asegura que la entidad enviará a sus socios una carta en la que les propondrá que estudien abrir el 7 de octubre, día de la festividad del Rosario. El representante de los dueños de negocios del centro indica que hay comerciantes que querrán "probar"; y otros, no. "Nosotros animamos a la gente, pero no por el barquito, sino porque muchos turistas visitarán la ciudad", indica Amor refiriéndose al trasatlántico Independence of the Seas, que atracará el día del Rosario en la ciudad con 5.000 cruceristas a bordo.

El portavoz de los dueños de los establecimientos recalca que la mayoría de visitantes extranjeros que llega en trasatlánticos apenas consume. Amor, además, destaca que algunos de los comerciantes no abren los domingos ni festivos porque no se pueden permitir el "lujo" de contratar a un empleado y son los únicos días que tienen de descanso. El representante de los propietarios de los establecimientos del centro también recalca que la ley prohíbe abrir a propietarios de los locales de más de 150 metros cuadrados. "Algunos comerciantes abrieron el 15 de agosto. A algunos les compensó, y a otros, no tanto", indica Amor.

El dirigente de Área Obelisco reclama colaboración a las instituciones para terminar con el top manta. "Los domingos y festivos por la calle Real casi no se puede ni pasar. Nos piden que abramos las tiendas, pero nos tienen que ayudar porque la gente ya pasea por otros sitios", señala Amor, al tiempo que destaca que los comerciantes cambiarán el "chip" conforme la ciudad incremente el turismo y los servicios.