La edil socialista Nieves Vázquez quiso conocer ayer cómo medía la Concejalía de Fiestas el retorno económico de los festejos de agosto. A pesar de que la edil de este área, Ana Fernández, estaba en el salón de plenos, fue el portavoz municipal, Julio Flores, el que respondió a Vázquez. "Si tuviésemos más dinero invertiríamos más en fiestas", concluyó el portavoz municipal, que aseguró que las calles habían estado "abarrotadas, repletas de vecinos, visitantes y turistas" durante el mes de agosto, aunque no hizo referencia a ningún estudio técnico de ninguna universidad u organismo reconocido que justificase sus cálculos de que el Ayuntamiento había invertido "50 céntimos por cada asistente" a las fiestas de agosto.

El portavoz nacionalista, Xosé Manuel Carril, criticó ayer al Gobierno local por no haber permitido que la oposición mantuviese una reunión con el comité de Albada en un espacio municipal y que los constructores Jove y Collazo paseasen por María Pita a sus anchas.

El portavoz de Esquerda Unida- Os Verdes, César Santiso, quería saber ayer cuántas contrataciones por procedimiento negociado se habían hecho y por qué motivos durante el gobierno del Partido Popular. La concejal de Hacienda, Rosa Gallego, no le contestó a su pregunta, aunque aseguró que desde que el PP estaba en el Concello, se invitaba a "cinco empresas de las cien de la ciudad" para que ejecutasen los trabajos programados. Apuntó, eso sí, a un contrato adjudicado por el Gobierno de coalición de PSOE y BNG como ejemplo de lo que no se debe hacer. El Concello recibió "hace unos días" un informe de la Intervención General de la Administración del Estado en el que propone la devolución de más de 200.000 euros por haber cometido "distintas irregularidades" en la adjudicación de las obras de la plaza de Os Mariñeiros. Estos trabajos se licitaron en tres partes a la misma empresa cuando, dice el informe, suponían una "actuación única".