-¿Cuál es el función de Indra en el desarrollo del proyecto Smart City?

-Nosotros acudimos en un consorcio con otras empresas gallegas como R, Altia e Illux y fuimos adjudicatarios del proyecto. Nuestro papel va a consistir en desarrollar una plataforma horizontal, que dará soporte a los pilotos verticales, y que permitirá recoger toda la información que genera la ciudad a través de los diferentes sensores instalados en diferentes puntos de A Coruña. Toda esa información queremos ponerla a disposición de nuevos servicios del Ayuntamiento para hacer su actuación más eficaz o al servicio de terceros para desarrollar nuevas aplicaciones y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

-¿En qué consistirán esos pilotos verticales?

-Pretenden probar diferentes ámbitos de una Smart City en una ciudad real como es la de A Coruña. Estamos hablando de pilotos en temas como la seguridad ciudadana, el ámbito de la movilidad o de la gestión de energía. Pilotos que en algunos casos cubrirán una zona concreta de la ciudad para probar lo que puede ser el 5%, y que, en otros casos, cubrirán el 100% de la ciudad con el fin de generar información útil para el ciudadano y la administración.

-Pero, en lo concreto, ¿en qué se verá beneficiado el ciudadano en su día a día?

-Yo creo que tendrá dos tipos de beneficios. Por una parte va a disfrutar de una mejor gestión de los recursos por parte de la Administración local, algo que en estos tiempos es importante. Por otra, el ciudadano va a disfrutar de una mejora en los servicios públicos que en estos momentos está recibiendo. Por ejemplo, se tendrá más información de lo que ocurre en la ciudad, el Ayuntamiento también tendrá acceso a estos datos, se mejorará la interactuación entre administración y vecinos.

-Desde el Concello se ha apuntado a que la información recogida podría generar puestos de trabajo indirectos. ¿Está de acuerdo?

-Sí, yo creo que uno de los objetivos es crear en A Coruña un gran laboratorio de desarrollo de servicios Smart City. En este año he conocido a muchas empresas coruñesas y gallegas y me he sorprendido gratamente del nivel de desarrollo de soluciones tecnológicas que tenemos en la ciudad. Son soluciones que en muchos casos tienen una buena adaptación al entorno Smart City. Lo que les hace falta a estas empresas es la capacidad de integrar las soluciones con una Smart City para luego llevarlos a otros sitios, bien directamente o bien de la mano del consorcio que lo está desarrollando actualmente. Desde Indra nos proponemos llevar el proyecto de Smart City a otras ciudades nacionales e internacionales y generar un efecto tractor sobre las empresas coruñesas y gallegas para que nos acompañen en esta aventura.

-¿Cuál ha sido la particularidad de A Coruña al desarrollar el proyecto de Smart City?

-El de aquí es un proyecto diferencial porque tiene una concepción global desde sus inicios. El proyecto coruñés parte del desarrollo de una gran plataforma horizontal que va a dar un servicio y una visión global de la ciudad que ayudará a tomar mejores decisiones, tanto desde la administración como desde el punto de vista ciudadano. En España y en el resto del mundo ha habido bastantes iniciativas del ámbito del Smart City pero, realmente, más que ciudades Smart City tendríamos que hablar de simples proyectos verticales que sí mejoraron la gestión en un ámbito concreto pero que no tienen esta visión global de lo que es la ciudad y que por lo tanto se quedan en un nivel inferior en cuanto a las ventajas que se puede aportar.