Dos hombres, de 33 y 30 años, fueron denunciados por una patrulla de la Policía Local en la madrugada del sábado al domingo cuando los agentes ordenaban el cierre de un bar en la calle Asturias por superar el horario autorizado. Uno de los hombres insultó a los policías y lanzó una botella de cristal contra la puerta del coche en el que viajaban, tras lo que echó a correr cuando iban a identificarle.

Durante la persecución, el otro hombre se interpuso en la carrera de uno de los policías para evitar que alcanzase a su amigo, aunque finalmente pudo ser interceptado. Ambos fueron identificados por los policías, que trasladaron las diligencias al juzgado de guardia para que determine si los hechos suponen faltas penales contra el orden público y daños en vehículo policial, que podrían ser delito en función de su valoración.