Tres negocios coruñeses recibieron ayer de la Dirección Xeral de Comercio distinciones por sus innovadoras propuestas comerciales. Se trata del espacio cultural Berbiriana, en la Ciudad Vieja; la empresa de alquiler de segways y bicicletas Eco-lógica, en Monte Alto, y la boutique La Canalla Gourmet, en Pescadería.
Los premios Comercio con talento, organizados por la Consellería de Economía e Industria para impulsar la innovación y el emprendimiento, han reconocido a estos establecimientos locales a partir de los trabajos presentados por alumnos de los ciclos de Comercio y Marketing del instituto Ramón Menéndez Pidal, en Zalaeta. La Xunta buscó así favorecer el contacto del alumnado con el sector. Los estudiantes premiados recibieron tarjetas regalo para gastar en comercios locales.
"Es una librería, pero también un lugar de encuentro". Alejandra Lata, que junto con su socia Cristina Barbeito regenta Berbiriana, en la calle Santiago, define así un proyecto que es mucho más que una librería. En este local, que también funciona como negocio de hostelería, se organizan conciertos, presentaciones de libros e incluso exposiciones, que se renuevan periódicamente. Tanto Lata como Barbeito vivieron "muchos años fuera", en ciudades en las que existían espacios de este tipo, de los que eran clientas. Echaban en falta "un sitio así en A Coruña -explica Lata-, un lugar donde la gente pueda hablar de literatura, tomar un café, asistir a un concierto...". Abrieron hace cuatro meses y, según dicen, no les va mal. Esperan, con el tiempo, poder vivir de esto. "Por lo menos no le debemos dinero a nadie", afirma Lata con humor.
Raúl Modroño, uno de los alumnos premiados por su trabajo sobre Berbiriana, declaró que estudiaron de este local "su accesibilidad, la decoración y la innovación". Modroño justificó ayer la elección por tratarse de "una librería diferente con muchas actividades". Lata resaltó lo positivo de un reconocimiento que da visibilidad a negocios "que poca gente se atreve a abrir", aunque quiso dar protagonismo a los alumnos. "El premio es para ellos, no para nosotras", declaró.
Eco-lógica nació en 2006 como una empresa de alquiler de segway, medio de transporte eléctrico con dos ruedas y manillar, para campañas de publicidad y, con el tiempo, también para rutas de ocio. En 2009 abrieron su tienda en la calle Cantábrico, donde, además de trabajar con segways, introdujeron la posibilidad de alquilar bicicletas, algo que según Javier Roca "no era habitual" en aquel momento en A Coruña. Sí lo era en otras ciudades, apunta Roca, donde los turistas podían "recorrer más superficie en menos tiempo y llevarse una sensación más divertida". A partir de ahí, Eco-lógica entró "de lleno en el mundo de la bicicleta", explica Roca, con la venta, la reparación o la personalización de las bicis. Poco a poco, el negocio se fue orientando no sólo al turista, sino también al cliente local. Roca cree que hoy "la bicicleta es un complemento más, para trabajar o para disfrutar y no sólo para pedalear de chándal como hace años". En la actualidad, Eco-lógica también distribuye para toda España elementos para el ciclista urbano, como hinchadores públicos o estaciones de reparación.
Olga Amado lleva con La Canalla Gourmet, en la calle Bailén, desde diciembre. Se trata de una boutique, "a diferencia de otras, orientada a un público más joven", explica Amado, que pone mucho cuidado en la estética, "tanto en la propia tienda como en el empaquetado de los productos". Amado destaca que entre sus clientes hay tanto "gente del barrio" como "adolescentes". "El tema del gourmet lo asociamos a gastar mucho dinero y no siempre es así", considera Amado, que emprendió su proyecto, como tantos otros, después de "viajar y trabajar fuera". En la tienda ofrece mermeladas, galletas, cervezas artesanas... Amado afirma que se adapta "a lo que la gente va pidiendo", cuida mucho las redes sociales y busca "colaboración con otros comercios y bares del barrio". Además, cuenta con un servicio de entrega a domicilio con la empresa local de transporte sostenible Vannenbike.
