El grupo socialista echa mano del programa electoral con el que concurrió a las municipales de mayo pasado para establecer áreas preferentes en las que los presupuestos del Gobierno de Marea debería incidir. No son pocas: políticas sociales, educación, empleo, barrios, cultura. "Tiene que haber un cambio de dirección que dé más peso a las personas en la elaboración de los presupuestos. Los ciudadanos tienen que estar por encima de todo", enfatiza el portavoz de la agrupación local del PSOE, José Manuel Dapena.

Con más concreción, Dapena apuesta por que el plan de barrios "evite la centralización", es decir, que todas las zonas de la ciudad merezcan la misma atención e inversión; propone apoyos a la Orquesta Sinfónica de Galicia y a los Museos Científicos "porque son motores de la ciudad y ha habido desatención"; insiste en que se apliquen medidas de apoyo al pequeño comercio que el PSOE ha propuesto y han sido llevadas a la práctica; e insta al Gobierno local a invertir en acciones educativas de "máxima calidad" a través del fomento de becas y con el diseño de un plan de reformas de las instalaciones que necesiten mejoras.

Dapena se detiene en el plan de rescate social que incluía una moción aprobada en el último pleno, que contiene un paquete de soluciones para colectivos desfavorecidos. Aunque el PSOE pide al Gobierno de Xulio Ferreiro que desarrolle políticas sociales con reflejo en los presupuestos de 2016, ya ha empezado a sugerir iniciativas en la comisión de Justicia Social, lo que provocó que el alcalde respondiese reprochando al PSOE que quiera imponer políticas en lugar de controlar la gestión municipal.

Como el PP, los socialistas están a la espera de ser convocados para conversar sobre la elaboración del próximo presupuesto, además de las ordenanzas fiscales que determinarán en gran medida con qué ingresos puede contar el Concello. Proponen un nuevo diálogo después de que fracasara a última hora el acuerdo sobre el cambio en el presupuesto de este año, lo que motiva dudas respecto al entendimiento del Ejecutivo con una de las fuerzas de la oposición que apoyó en junio la investidura de Ferreiro.