Los dos sicarios contratados por una vecina de A Coruña para asaltar la casa de su exsocia para recuperar una deuda de 2.850 euros aceptaron ayer ser condenados a seis y cuatro años de cárcel. La inductora del atraco, cometido en octubre de 2013 en una vivienda de Sigüeiro, se declaró culpable y fue sentenciada a dos años de prisión, pero no estará privada de libertad porque carece de antecedentes penales. Uno de los procesados, que se enfrentaba a una petición de 22 años de cárcel, disparó con una pistola de fogueo en la sien de la afectada, que sufrió lesiones muy graves. La Fiscalía tuvo en cuenta las atenuantes de drogadicción y de alteración psíquica a la hora de acordar la pena -6 años de cárcel- con la defensa de este acusado.

Los cinco implicados en el caso pactaron ayer las condenas con el fiscal, quien accedió a rebajarles las penas que solicitaba en su escrito de calificación. De esta forma, el juicio no se celebró y el tribunal de la sección segunda de la Audiencia Provincial dictó sentencia oral en la sala. Los asaltantes, que llevaban sus rostros cubiertos con pasamontañas, abordaron a la víctima sobre las 21.20 horas en la puerta de su casa armados con una pistola que resultó ser de fogueo y con una pata de cabra de acero. Tras intimidarla y amenazarla, consiguieron que les dejase entrar en su domicilio, donde se encontraban su hermano, su marido y su hija de nueve años. La menor sufre secuelas psicológicas porque presenció el asalto y la violencia ejercida contra sus padres.

Los asaltantes les exigieron que les entregasen todo el dinero y objetos de valor que tuviesen y los amenazaron de muerte. En ese momento, los moradores comenzaron un forcejeo con los sicarios, quienes los golpearon con la barra de hierro y la pistola. Uno de ellos llegó a poner un cuchillo en el cuello al hermano de la dueña de la vivienda. Durante la disputa, uno de los procesados reconoció que puso el arma de fogueo en la sien de la exsocia de la inductora y disparó. "No tuvo posibilidad alguna de defenderse ante tal ataque sorpresivo", destaca el fiscal en su escrito de calificación. Los sospechosos consiguieron huir de la casa con 400 euros en efectivo, algunas joyas y tres móviles. Antes de abandonar el inmueble, bajaron los fusibles, cogieron las llaves y cerraron desde el exterior.

La inductora contactó con los asaltantes a través de un amigo, que también aceptó ayer ser condenado a dos años de cárcel, pero no ingresará en prisión porque carece de antecedentes penales. La Fiscalía tuvo en cuenta a la hora de pactar con la defensa del sospechoso, ejercida por Diego Reboredo, las atenuantes de drogadicción y reparación del daño. En su escrito de calificación la acusación pública demandaba que el sospechoso fuese penado con cuatro años de cárcel. El sospechoso reconoció ayer al declararse culpable que su amiga le encargó que consiguiese "a dos personas" para cobrar una deuda a su exsocia. El condenado contactó con los dos sicarios, con quienes se reunió en A Coruña para concretar el plan. La imputada les proporcionó los datos personales de la víctima y les entregó un sobre con 400 euros para sufragar los gastos necesarios. El amigo de la presunta inductora trasladó en su vehículo a los dos procesados hasta la vivienda de la perjudicada y esperó en el coche a que cometieran el asalto.

En el banquillo también se sentó ayer la mujer de uno de los sicarios por vender la alianza de boda de la víctima en una tienda de compraventa de oro de Arteixo a sabiendas de su origen ilícito. La mujer aceptó ser sentenciada a seis meses de prisión.