La insuficiencia de las aportaciones de la Xunta para financiar toda su actividad lleva a la Universidade da Coruña a plantearse el incremento de los ingresos por investigación y de la financiación privada para mejorar su situación económica. Así aparece recogido en las líneas generales del presupuesto para 2016 que el rector expondrá mañana en el claustro, aunque el documento deberá ser aprobado por el Consello Social de la institución académica.

El rectorado no proporciona una cifra definitiva del presupuesto, aunque los datos que ofrece hacen prever que no sea muy diferente de la del año pasado, que fue de 116,2 millones de euros. La suma de las tres principales fuentes de ingresos -tasas, transferencias corrientes y transferencias de capital- sumaron en el pasado ejercicio 113,51 millones y para el actual se espera que alcancen los 114,56 millones. En el capítulo de gastos, inversiones reales, personal y bienes y servicios sumaron en 2015 la cifra de 112,24 millones, mientras que ahora se espera llegar a 113 millones.

Las inversiones caerán este año un 23,14% para situarse en 9,1 millones, lo que el rectorado justifica por el final de las obras del Centro de Investigación Tecnolóxica en Edificación e Enxeñaría Civil (Citeec), previsto para la primera mitad de 2016, aunque también admite la existencia de un "gran número de peticiones" para la reparación de cubiertas de centros, así como para adquisición de sistemas de comunicaciones, material de oficina y otros gastos.

Ante la falta de recursos suficientes, el informe que se presentará a los claustrales destaca la necesidad de captar recursos a través de los contratos de investigación aplicada, los proyectos de investigación, así como mediante el patrocinio y el mecenazgo. El equipo de gobierno pone de relieve que en el nuevo sistema de financiación que se pondrá en marcha para el próximo cuatrienio "la parte de financiación por resultados va a ser cada vez más importante", de forma que si ahora se sitúa en el 36%, la previsión es que en 2020 llegue al 40%.

El informe califica de "vital" la revisión de la financiación que proporciona la Xunta, para lo que recuerda que el coste estándar, uno de sus componentes, está en el 27,05% y que debería llegar al 29%, porcentaje que supone en la estructura el profesorado, personal y alumnos y créditos matriculados.