La concejalía de Participación e Innovación Democrática ha abierto el primer frente de guerra tras la aprobación inicial del presupuesto enmendado por PP y PSOE. La responsable del área, Claudia Delso, denunció ayer que los cambios en las cuentas dejan a este departamento "sin capacidad de maniobra" para impulsar políticas propias.

El proyecto inicial del Gobierno dotaba a esta concejalía de 1,62 millones de euros. Socialistas y populares acordaron recortar 464.000 euros en total. Por ejemplo, los fondos para la contratación de especialistas en los procesos de participación pasa de 200.000 a 10.000 euros, mientras que la partida de campaña informativas del área -conocidas técnicamente como publicidad y propaganda- pasa de 160.000 euros a 0. "Se suprime el derecho a la información pública de la acción municipal y el correlativo derecho de participación de la ciudadanía", denunció la edil.

Delso alega que un millón de euros se corresponden a contratos ya comprometidos, como son la externalización del servicio 010, del Centro Municipal de Información Xuvenil (Cemix) o de varias conserjerías municipales, por lo que los fondos restantes apenas dan margen, dice, para impulsar nuevas iniciativas. "Estamos reestructurando todo para ver qué podemos hacer con lo que queda", indicó.

Precisamente ayer se celebró la Comisión de Participación en la que la concejal, además de expresar estas quejas, solicitó al edil del PSOE, Fito Ferreiro, su dimisión como presidente del órgano. "Es una coherencia presidir esta comisión a la vez que se contribuye a dejarla sin fondos", aseguró Delso.

Fito Ferreiro acusó al Ejecutivo de actuar con "victimismo" y rechazó que las enmiendas supongan una reducción de la capacidad financiera. "Los fondos que se desvían son para ayudar económicamente a colectivos de la ciudad, así que eso también ayuda a mejorar la participación", afirmó Ferreiro.

La comisión municipal de ayer también aprobó el reglamento de los plenos municipales que se celebrarán fuera de María Pita. El primero de ellos, que girará en torno al Debate sobre el estado de la ciudad, se celebraría en el centro cívico de Monelos el 26 de abril o el 10 de mayo. Los socialistas piden al alcalde "valentía" para aprobar en el próximo pleno la celebración de esta sesión fuera de María Pita, aunque acusan al Gobierno de "poner trabas" a esta iniciativa.

Esta concejalía fue una de las grandes apuestas del Gobierno de la Marea. Este departamento fue el responsable de impulsar iniciativas como el Escaño Ciudadano, que permite a los vecinos intervenir al final de cada pleno ordinario; el Dillo Ti, un programa de encuentros en los barrios diseñados para que los concejales rindan cuentas ante los ciudadanos; o el A Porta Aberta, con la que se busca diseñar las fronteras de un nuevo mapa de distritos para la ciudad.