El hombre de 41 años que el pasado mes de octubre atracó a punta de cuchillo una tienda de congelados de O Castrillón aceptó ser condenado a dos años de cárcel. El imputado, que permanece en prisión provisional desde el 23 de octubre, reconoció que sobre las ocho de la tarde accedió al establecimiento con un casco de moto puesto. El procesado fue directo hacia la propietaria del negocio, que estaba tras el mostrador, y le exigió que abriese "la caja" y le entregase "todo el dinero que tuviese". La mujer se negó, ante lo que el condenado reaccionó esgrimiendo un cuchillo con mango de madera y diez centímetros de hoja "con la finalidad de amedrentarla, disminuir su capacidad de defensa y presionarla psicológicamente", indica el juez de Penal 1 en la sentencia.

El acusado admitió ante el magistrado que empuñó el arma blanca hacia la dueña del establecimiento e insistió en que abriera la caja. La víctima se negó por segunda vez y, en ese momento, el condenado hizo ademán de clavarle el cuchillo en el vientre.

"Al temer por su vida, retrocedió y golpeó varias veces con su pierna en la mano en la que el acusado llevaba el arma, al tiempo que pedía auxilio", relata el juez en el fallo, en el que indica que el asaltante decidió abandonar el local por los gritos de la afectada y la resistencia que opuso. "¡Cuidado que tiene un cuchillo y me lo intentó clavar!", exclamó la perjudicada en cuanto emprendió la huida. Un viandante que estaba en la calle Alicante logró retener al procesado hasta que llegó la policía.

La víctima, que tuvo que recibir asistencia médica, sufrió trastorno de ansiedad y estrés postraumático. La afectada se presentó como parte en el procedimiento judicial y reclamó la indemnización que pudiera corresponderle. El magistrado del Juzgado de lo Penal número 1 de A Coruña decretó que el imputado abone a la dueña de la tienda de congelados 1.500 euros.

La Fiscalía solicitaba en su escrito de calificación que el acusado fuese condenado a tres años y nueve meses de cárcel, pero finalmente llegó a un acuerdo sobre la pena con la defensa del sospechoso antes del juicio. Así, el hombre se declaró culpable y aceptó ser sentenciado a dos años de prisión por cometer un delito de robo con violencia y uso de armas en grado de tentativa y otro de lesiones. El procesado reconoció los hechos y se declaró culpable, por lo que el titular de Penal 1 dictó sentencia oral en la sala. Contra el fallo no cabe recurso porque fue impuesto con la conformidad de todas las partes.