La conexión del centro de la ciudad con el puente de A Pasaxe y el campus universitario es el primer objetivo que se marca el Gobierno local con la ampliación de la red de carriles bici existente en la actualidad, que suma 17,3 kilómetros de longitud, aunque en tramos inconexos. El aprovechamiento de esos recorridos actuales, cuya ineficacia ha sido criticada de forma reiterada por los colectivos ciclistas, permitirá extender su trazado para que tengan una utilidad real y que alcancen de forma inmediata los 25,1 kilómetros. La inversión prevista es de 1,1 millones de euros, en la que colaborará la Diputación.

A este proyecto se suma el de la conexión de los carriles bici existentes con los del área metropolitana mediante tramos de 5,5 kilómetros que llegarán a Culleredo y Arteixo. La primera fase de esta actuación tendrá un longitud de 1,7 kilómetros y enlazará la Universidad con el paseo marítimo de O Burgo.

El concejal de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz, anunció ayer que después del verano comenzarán los trabajos para construir esos nuevos tramos, que formarán parte del objetivo fijado por el Gobierno local para este mandato, en el que se establece la existencia de 107 kilómetros de "vías ciclables" en el municipio para "conectar todos los barrios". En esa denominación no entran solo los carriles bici, sino también las calles en las que se favorecerá el uso de la bicicleta mediante el "calmado" del tráfico.

Díaz explicó que la implantación de este tipo de vías se realizará de forma "gradual y ordenada" y en la calzada en lugar de en las aceras con el objetivo de no restar espacio a los peatones. El carril bici que unirá el centro con A Pasaxe partirá de la Dársena de La Marina, donde aprovechará la supresión de la mayor parte del tráfico rodado y, una vez en la plaza de Mina, ocupará parte de la calzada mediante una reducción del espacio existente para el tráfico y el aparcamiento, aunque el concejal aseguró que para este último la supresión de plazas será "mínima".

Díaz detalló que el carril irá separado en cada uno de los sentidos de la circulación, aunque no aclaró en qué parte de la calzada se instalará. La imposibilidad de situarlo junto a la acera en el sentido de salida de la ciudad ante la existencia de plazas de aparcamiento, así como por la necesidad de desviarse hacia la izquierda en la confluencia de Linares Rivas con Alfonso Molina, hacen suponer que ese carril bici se construya junto a la mediana de la avenida, aunque ese extremo debe ser confirmado por el Gobierno local. El trazado aprovechará el carril bici existente en el parque de San Diego y luego recorrerá la avenida de A Pasaxe hasta llegar al puente, donde enlazará con el del paseo marítimo de O Burgo.

El carril bici hasta el campus seguirá el mismo trazado que el anterior desde el centro hasta llegar a la plaza de A Palloza. De allí partirán dos rutas diferentes, una por Cuatro Caminos, Fernández Latorre y Salgado Torres hasta Pablo Picasso, donde se unirá al carril ya disponible hasta los centros universitarios. La otra posibilidad es desviarse en Fernández Latorre hacia Pérez Ardá y seguir por Salvador de Madariaga y de allí continuar hasta Matogrande.

Otra de las actuaciones que pondrá en marcha Mobilidade Sostible es el aumento de plazas de aparcamiento para bicicletas mediante la instalación de 110 módulos en los próximos tres años, lo que proporcionará espacio para 1.320 bicis gracias a una inversión de 220.000 euros. Díaz destacó que para instalarlos se suprimirán plazas para vehículos junto a pasos de peatones que reducen la visibilidad de los conductores.

También se intervendrá en el servicio Bicicoruña para aumentar su número de estaciones, que en la actualidad es de 22. La próxima se abrirá en O Castrillón y el objetivo es que al final del mandato la distancia máxima entre estaciones sea de 500 metros. Díaz anunció además que el horario del servicio se ampliará una hora más, por lo que cerrará a las 22.30 horas en invierno y a las 23.30 horas en verano.

El concejal mencionó el crecimiento constante que experimenta Bicicoruña, ya que en 2015 contó con 2.915 usuarios, mientras que a lo largo del año superó por primera vez los 200.000 usos y los 20.000 en un solo mes. Este año se cuenta ya con 3.167 usuarios y se confía en volver a sobrepasar el récord mensual de usos de bicicletas.