La iglesia de Santiago, cuya parroquia se extiende por "todo el centro histórico, incluida la plaza de María Pita y el rectorado", explica su párroco, Andrés García Vilariño, abrirá sus puertas al público la noche del 12 de agosto. Es la primera vez que la iglesia desarrolla una iniciativa de este tipo, que idearon inspirándose en el Atrio de los Gentiles, una actividad que inició el Papa Juan Pablo II con el fin de "crear un espacio desde las artes, como la música, la danza o la poesía, para llamar, no a la fe necesariamente, sino a sentirse a gusto", explica el párroco.

Esta es la línea que seguirá la iglesia de Santiago, que propondrá actividades como la lectura de textos poéticos y la interpretación de espirituales negros a cargo de una soprano, en su noche de puertas abiertas "debido a su interés cultural", aclara Andrés García. Añade que se pretende "ofrecer motivaciones extra para reflexionar, no es una manipulación o encerrona para los no creyentes, es para disfrutar de un espacio hermoso acompañados por música, reflexión y poesía".

El camino de Santiago es uno de los atractivos de esta iglesia en la que se emiten y sellan credenciales, ya que es una parada importante en el camino inglés. Su párroco explica que este no es muy popular al haber solo un albergue de peregrinos, en Bruma, por lo que este no es el mayor reclamo de la iglesia para sus visitantes. Lo que más gusta a los visitantes "es el ámbito tan diáfano, tan abierto. Es realmente sorprendente el contraste entre los tres ábsides románicos de la etapa anterior y la nave actual, que llama a la comunicación, es un espacio muy grande", dice Andrés García, que destaca también la disposición del techo de la iglesia, que "tiene la estructura de una quilla de barco, parece inspirado por marineros, como una barca invertida".

Los visitantes tendrán la oportunidad de conocer más a fondo las singularidades de este espacio, entre las que predominan las dos arcas romanas de un templo sobre el que se edificó la iglesia, "por lo que ya era un lugar sagrado antes de la aparición del cristianismo", cuenta Andrés García.

El párroco comenta que está "muy ilusionado" con la iniciativa, que se desarrolla por primera vez, pero que espera repetir si tiene una buena acogida.