Un hombre fue condenado por descargar archivos pedófilos en su ordenador en julio de 2013, cuando tenía 36 años. El sospechoso fue sentenciado al abono de una multa de 1.080 euros por cometer un delito de tenencia de pornografía infantil para uso propio. La Fiscalía demandaba en su escrito de calificación que fuese sentenciado a diez meses de cárcel, mientras que su defensa solicitaba su libre absolución. Finalmente, ambas partes llegaron a un acuerdo antes del juicio, por lo que la vista oral no se celebró y el magistrado del Juzgado de lo Penal número 1 de A Coruña dictó sentencia oral. Contra el fallo no cabe recurso porque fue dictado bajo la conformidad de todas las partes implicadas en el caso.
El procesado, que carece de antecedentes penales, reconoció ante el juez que era el único usuario de la cuenta de internet asociada al número de teléfono contratado por su padre con una operadora para el domicilio familiar. El acusado instaló y configuró en el ordenador de la vivienda un programa de intercambio de archivos mediante el que, en fecha "inmediatamente anterior" al 2 de julio de 2013, descargó dos documentos que contenían pornografía infantil. Los agentes que investigaron los hechos localizaron en el disco duro de la computadora del sospechoso una imagen sexual de un menor, así como restos de haber instalado una aplicación utilizada para compartir archivos de este tipo. Los expertos comprobaron que los nombres de las descargas eran "los habitualmente empleados en archivos pedófilos".
