A Coruña disfrutó este año de los mejores delanteros de la OK Liga. Pablo Álvarez, del Coinasa Liceo, y Toni Pérez, del Patín Cerceda, se alzaron con el título honorífico de pichichis de la categoría. Ambos empataron en lo alto de la clasificación de goleadores. Hicieron 43 dianas en 30 partidos, una cifra que da lustre a su espectacular calidad como jugadores.

Esta temporada fue la de la consagración de Pablo Álvarez (San Juan, 1986). El ariete argentino ya había conseguido meterse entre los mejores cañoneros de División de Honor, pero fue hace dos campañas, en la 2007-08. En aquella ocasión ocupó la tercera posición, con 32 goles, por detrás de Alberto Borregán (36) y Pedro Gil (34).

Sin embargo, la siguiente no fue demasiado buena para el verdiblanco. Sólo pudo anotar once tantos. Álvarez reconoció después que estaba obsesionado con el gol y que eso fue un lastre demasiado pesado en ese ejercicio, el último de José Querido al frente del Liceo. El de San Juan, no obstante, sacó una lectura positiva de ese mal año. "Aprendí muchas cosas en defensa".

Si hay alguien que puede apreciar su trabajo, ése es, sin dudas, su entrenador, Carlos Gil: "Es un jugador que tiene muchísimas condiciones, la primera que es muy joven y que para la edad que tiene, posee un nivel de juego muy maduro. Después, tiene todas las condiciones: es rápido, listo en el área, técnicamente muy bueno y con gran ejecución. Eso le da la posibilidad de resolver y marcar goles".

El técnico argentino da todavía más valor a los 43 tantos de su pupilo porque ni juega muchos minutos ni es un lanzador de faltas: "Ha hecho la mayoría de sus goles en jugada, lo que le da más mérito a la cantidad. Además, tiene que repartir los minutos con Josep Lamas y Ricardo Barreiros, pero los que tiene, los aprovecha bien".

Pablo Álvarez es la última joya de la cantera inagotable de talentos de San Juan. ¿Qué comen por allá? Gil lo tiene claro: "En San Juan comen hockey. Hay 17 equipos en División de Honor en una sola provincia. Eso da el por qué de que salgan tantos y tan buenos jugadores. Comen pista y mucho hockey, que es lo que se respira en la ciudad".

Toni Pérez (Oviedo, 1990) tampoco se queda atrás. Si la temporada de Pablo fue la de la consagración, lo del delantero asturiano fue una auténtica revelación. El pupilo de Juan Copa llegó a la OK Liga pisando fuerte. No era su estreno en la máxima categoría, pero sí la primera vez en la que disfrutaba de muchos minutos. El balance, a nivel individual, no puede ser mejor con sus 43 goles. Él solito marcó casi los mismos tantos que todo su equipo junto. Y se llevó el pichichi, un título que le sabe algo amargo por culpa del descenso del Patín Cerceda.

"Toni es un jugador que tiene gol. Siempre lo ha tenido", explica su entrenador, que especifica: "Necesita que trabajen para él, porque es un gran finalizador, pero lo que no se puede negar es que tiene una trayectoria ascendente impresionante y que marcar 43 goles en la OK Liga no está al alcance de todos. Una de sus condiciones es que transmite mucho, es espectacular, y va a portería. Vive de eso y le encanta".

Copa también habla de una gran capacidad de mejora: "Lógicamente está en edad de formación y él sabe perfectamente que tiene que mejorar muchísimas cosas para ser un mejor jugador, como el aspecto defensivo. Ya lo he hablado con él muchas veces, todavía tiene que hacerse mejor jugador. Cada vez los equipos le conocerán más y harán marcajes especiales sobre él. Pero es un chaval listo y al que le encanta el hockey. Quiere llegar muy arriba, por lo que tiene que tener humildad para seguir trabajando".

Carlos Gil también valora en positivo al asturiano: "Tiene muchísimo gol, ha demostrado que tiene una gran capacidad de cara a portería, tanto en jugadas en movimiento como a bola parada. Sus 43 goles son una cifra espectacular para un chico de su edad y que ha tenido su primer año de experiencia en División de Honor".

Ganarse los halagos del argentino no es sinónimo para Toni Pérez de conseguir un puesto en el equipo para la próxima campaña. "Cuando me comunicaron que no contaban conmigo, tuve que buscarme la vida", dice el de Oviedo en alusión a su fichaje por el Alcoy. Carlos Gil replica que a él le "hubiese gustado que se hubiera quedado". ¿Pero en dónde, en el Liceo o en el Cerceda? "Bueno, el Cerceda forma parte de la estructura general del Liceo".