Uriarte estaba muy dolido por la decisión arbitral que lo privó de la medalla de bronce. Quería dedicarle este éxito a su madre, fallecida el año pasado. "Yo estaba seguro de que ganaba el combate, pero se ve que los árbitros no han visto el mismo combate. Ha estado muy igualado, pero creo que había dado ese punto de más para que me adjudicaran la victoria. En parte es error mío porque si dejas que decidan los árbitros, esto puede pasar", dijo con los ojos llorosos.

"Es una pena perder la medalla después de toda la mañana llevando muy bien los combates. El judo a veces es injusto, te gana alguien que es peor que tú pero por lo menos he dado todo que es lo importante", lamentó Uriarte, que perdió en semifinales contra su ídolo, Miklos Ungvari. "Es muy inteligente, cuando empecé era mi gran referencia", sentenció.