Tenía cuatro años cuando al pasar por delante del pabellón de enfrente de su casa un entrenador le gritó desde la puerta si le apetecía probar el hockey sobre patines. Han pasado quince primaveras, muchos disgustos y muchas alegrías y finalmente Julia Cabanas (Santiago, 1993) está en el lugar que quiere: el Borbolla, un club en el que se siente como en su casa; con Carlos Parga, un entrenador con el que se entiende; con unas compañeras que son sus amigas y en la OK Liga, la máxima categoría nacional.

-Se crió en el Raxoi. ¿Por qué se decidió a dar el paso y fichar por el Borbolla?

-Ya había estado con Carlos (Parga) y me había encantado como entrenador así que cuando me llamó dije que sí sin pensármelo dos veces. Más cuando me dijo quiénes serían las jugadoras, porque todas eran mis amigas.

-Y le tentaron con la OK Liga.

-Lo de la OK Liga era un sueño a mayores. Nos dijeron que el proyecto era para eso. Ya lo habíamos intentado en Santiago sin éxito y ganas me sobraban. Estoy como viviendo un sueño.

-¿Qué sensaciones tiene tras los dos primeros partidos?

-Sobre todo ansia por ganar y meter más goles en los partidos. Las sensaciones fueron buenas, porque no nos lo esperábamos para nada y nos quedamos con ganas de más.

-¿Se convencieron de que pueden, de que tienen el nivel?

-Íbamos con idea de darlo todo pero en el primer partido no nos creíamos lo que estábamos haciendo y en el segundo, que ya estábamos algo más convencidas, tampoco nos lo terminábamos de creer. Creo que nos falta eso.

-Contra el Igualada, si entra una bola que fue al palo que sería el 4-5, les dan un buen susto.

-Tuvimos mala suerte de cara al gol, pero si no entran no podemos hacer nada. Por eso tenemos que seguir entrenando para que el próximo día no pasen esas cosas.

-Lleva ya tres goles.

-No me lo esperaba porque el año pasado estaba jugando un poco más atrás, pero este tengo una posición más cercana a portería y he tenido bastante acierto.

-¿Qué tienen que mejorar?

-La mentalidad, creernos que sí que podemos. No pensar que somos inferiores a nadie. Y también esa diferencia de llegar a portería y marcar ese gol que nos falta.

-Ahora tienen que esperar una semana para volver a jugar.

-Sí, la semana que viene hacemos el primer viaje. Estoy súper ilusionada, tengo muchas ganas de que llegue. A ver si las sorprendemos porque seguramente estén un poco confiadas. Jugamos contra Vilanova, que es un equipo que se ha quedado un poco cojo, y contra el Reus, que son chicas que dan duro.

-Y en el siguiente turno, el derbi contra As Travesas.

-Es el partido en el que Carlos más nos va a echar la bronca, ya lo estoy viendo (se ríe). Hay que ganar sí o sí, cueste lo que cuesta. Y ellas nos tienen muy medidas porque llevamos jugando las unas contras las otras toda la vida.

-¿Son favoritas teniendo en cuenta que las viguesas perdieron por 0-9 y por 0-10?

-Tenemos una forma de jugar distinta, no somos ni mejores ni peores. Ellas tienen más experiencia, son más pillas. Es algo que nos falta, la picardía. Yo creo que podemos ganar, en nuestras manos está.

-¿La permanencia es posible?

-Antes de estos dos partidos hubiera dicho que es muy difícil, pero ahora, después de lo que vi este fin de semana, nos tenemos que quedar en la OK Liga sí o sí. Nos lo merecemos. Que nos va a costar, sí. Pero tenemos que conseguirlo. Lo que vi, las sensaciones que tuvimos y las ganas que tenemos es de quedarnos mucho tiempo.