Ambos llevan al Deportivo en el corazón y la pasada campaña padecieron como cualquier aficionado. "Lo he visto sufriendo mucho y en el futuro espero no sufrir tanto. Ha sido una temporada muy complicada y se han unido situaciones extradeportivas que no han ayudado nada. Es el primer año de esta directiva en una competición de muchísima exigencia y todos tenemos que aprender, pero el club tiene buenas perspectivas de futuro y estoy esperanzado", comenta José, quien vio el partido de la salvación ante el Barcelona con un extra de sufrimiento: "Estaba de viaje peleando con el ordenador y se cortó en el momento en que metieron los goles, entonces al final fue una sorpresa tremenda". También pudo ver el encuentro Roberto a pesar de la diferencia horaria: "Eran las cuatro de la mañana pero era un partido para ver y estar animando".