La Vuelta Ciclista a España 2016 saldrá de la provincia de Ourense "posiblemente" con una contrarreloj por equipos y la idea de que la carrera tenga protagonismo con cinco etapas que transitarán por las cuatro provincias gallegas, según ha desvelado en Medina del Campo el director de la Vuelta, Javier Guillén.

La organización vinculará la salida de la primera etapa a las aguas termales de la provincia de Ourense, pero aún se deberá concretar el punto exacto del lanzamiento de la carrera, que será junto a un balneario, según explicó Guillén.

Al anuncio del lanzamiento de la Vuelta 2016 celebrado antes de la salida de la decimonovena etapa entre Medina del Campo y Ávila, asistieron junto a Guillén el presidente de la Diputación de Orense, José Manuel Baltar y la directora general de Turismo de la Xunta de Galicia, Nava Castro.

Antecedentes en 2013

La Vuelta regresa a Galicia para su lanzamiento, como ya ocurrió en 2013 cuando lo hizo en Vilanova de Arousa. Una comunidad que ha tenido protagonismo en las últimas ediciones de la ronda española con etapas que han quedado grabadas entre la afición, como la que tuvo lugar en Ézaro en 2012. Aquel año Galicia albergó 4 etapas integras por su territorio.

A Costa da Morte también dejó su sello en 2013 con la etapa de Fisterra, en la que se impuso el español Dani Moreno y el italiano Vincenzo Nibali se puso líder. Esta zona "mágica" podría ser de nuevo un punto clave de interés.

El presidente de la Diputación de Ourense, José Manuel Baltar, destacó "el gran impacto promocional y económico" que supondrá que la Vuelta comience en Ourense, con más de 2.000 personas integrando el dispositivo de la prueba. "Será un magnífico escaparate para difundir toda nuestra riqueza natural, artística, histórica y turística, con enclaves tan singulares como la Ribeira Sacra", comenta Baltar, que incide especialmente en la promoción de la provincia "como uno de los destinos termales más importantes del mundo, como se refleja en el plan "Ourense, la provincia termal" .

Los organizadores estiman que el impacto económico de una etapa de la Vuetla alcanza los 350.000 euros, contando los ingresos directos en hostelería y combustible, entre otros, a lo que añadir la repercusión mediática de una difusión que llega a 178 países. Entre las cifras destaca el importante número de personas acreditadas para seguir la prueba, que incluye casi un millar de periodistas nacionales e internacionales. La caravana completa, que incluye equipos, seguridad, organización y prensa, está formada por 2.500 personas.

Guillén confiesa: "Hace cuatro o cinco años tuvo un importante reencuentro con Galicia, uno de los territorios que más nos ha dado en cuestión de recorridos y cariño". Nava Castro asegura estar "muy satisfecha y contenta" con esa vinculación de Galicia con la Vuelta, "un escaparate que nos sirve para aumentar el turismo, lo que ya se ha notado en los últimos años".