Marc Márquez (Repsol Honda) no escondió ayer su felicidad por la victoria en el Gran Premio de San Marino, la cuarta del año, ya que era el "objetivo" principal que se habían marcado para este fin de semana.

"Es bueno estar aquí otra vez, el objetivo era la victoria y lo hemos conseguido. Salió todo redondo. Quería ganar aquí y lo he podido conseguir", admitió el piloto de Cervera, que fue el primero en ver la bandera a cuadros en el circuito de Misano-Marco Simoncelli.

Sobre la pelea con las dos Yamaha, Márquez destacó que fue a contracorriente de lo que proponían ambos en Misano. "Veía que detrás de Jorge (Lorenzo) no se iba del todo cómodo. Solo quería que pasara Jorge pero Valentino (Rossi) se coló. Iba detrás de ellos, que sufrían un poco con los neumáticos de agua. He decidido mantenerme y cuando he visto que con los de agua no podía seguir, me la he jugado con los slicks", apuntó.

Márquez agradeció al equipo la estrategia escogida para salir victorioso. "Sabía que sería difícil ganar en seco. Quería ganar aquí y lo he podido conseguir. He tenido que cambiar la moto dos veces, la primera vez que pasa. He hecho una buena estrategia, me han ayudado mucho en el equipo para elegir", señaló.