Un cabezazo de Deyverson en tiempo de prolongación dio un punto al Levante ante el Eibar, que cobró ventaja por 0-2 justo después del descanso, había jugado mejor hasta entonces y no había sufrido verdaderos apuros en los minutos finales del choque a pesar de que el Levante mejoró en el segundo tiempo.

El Eibar se quedó con la miel en los labios tras un partido en el que al menos se mantiene como invicto a domicilio.