Se acabó la pretemporada para Fernando Alonso, que la próxima vez que se suba al MP4-31 será ya en Melbourne (entrenamientos libres el día 18 de este mes) para dar inicio a la que será su decimoquinta campaña en la Fórmula 1.

Tuvo ayer el piloto asturiano una larga jornada de trabajo en el circuito barcelonés de Montmeló. McLaren tiene mucho que recuperar y la fiabilidad que ha evidenciado esta semana el nuevo propulsor de Honda invita razonablemente a la esperanza. No para ganar, pues Mercedes y Ferrari parecen inalcanzables, pero sí para empezar a plantar batalla. En los tres últimos días entre el ovetense y el británico Button han completado más de trescientas vueltas al circuito barcelonés con unos tiempos que les sitúan por la zona media de la tabla. Ayer Fernando Alonso cerraba la jornada tras dar 113 giros y marcar un mejor crono en 1:24.870; mejor al 1:25.382 establecido la víspero por Button pero peor al 1:24.735 logrado por él mismo en la jornada del martes.

Ahora les falta lo más complicado a los de Woking una vez han logrado fiabilidad, y es velocidad. Intentó Alonso una vuelta "para la galería" con los ultrablandos -algo que hacen todos los pilotos para subir puestos en la tabla- pero los destrozó antes de completar siquiera un giro. Hoy finaliza la pretemporada de McLaren con Jenson Button a los mandos .

Sí aprovechó el superblando Kimi Raikkonen para marcar el mejor tiempo de la pretemporada en Montmeló (1:22.765). Jornada brutal la del finlandés, que por la tarde realizó una simulación completa de carrera y que acabó con 134 vueltas. Hasta 140 llegó Mercedes con Rosberg y Hamilton, que siguen escondiendo la verdadera velocidad punta de sus monoplaza.

Por otra parte, Ferrari probó el sistema Halo, una protección adicional instalada en el monoplaza que podría empezar a emplearse a partir de 2017. La FIA confirmó su intención de "introducir algún tipo de protección en la cabina del piloto a partir de 2017".