El ciclista esloveno Primoz Roglic (LottoNL-Jumbo) se impuso ayer en la novena etapa del Giro de Italia, una contrarreloj de 40 kilómetros entre Radda in Chianti y Greve in Chianti marcada por la lluvia, que empezó a caer mediada la carrera y afectó a los favoritos al triunfo final, permitiendo al italiano Gianluca Brambilla (Etixx-Quick Step) mantener la maglia rosa por un segundo.

El corredor de Lotto saboreó las mieles del éxito y celebró su primer triunfo en una gran vuelta después de que se le quedaran en los labios en el prólogo de la primera jornada de carrera, en la que marcó el segundo mejor tiempo por décimas. Precisamente, el ganador de aquel día y máximo favorito este domingo, Tom Dumoulin (Giant-Alpecin), fue una de las decepciones, finalizando a casi dos minutos de Roglic. Cancellara (Trek) tampoco pudo con el tiempo del esloveno, perdiendo 28 segundos.