La Policía ha detenido a un total de 12 ultras del Legia de Varsovia tras los incidentes producidos este martes en Madrid en la previa del partido de 'Champions' que ha enfrentado a este equipo polaco con el Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu, según ha informado un portavoz de la Delegación del Gobierno.

Todos son de nacionalidad polaca y tres de ellos fueron detenidos esta madrugada por causar destrozos en un bar ubicado en la calle Illescas, en el distrito madrileño de Latina, con intentos de agresión a varias camareras del establecimiento.

Además, los enfrentamientos de los hinchas del Legia con agentes de Policía en los alrededores del estadio Santiago Bernabéu antes del encuentro dejan un balance de ocho personas heridas. Entre ellas, cinco ultras del equipo de fútbol, dos agentes de la Policía Nacional y otro de la Policía Municipal de Madrid.

Algo menos de dos horas antes del inicio del partido de la Liga de Campeones entre el Real Madrid y el equipo polaco, según confirmaron a EFE fuentes policiales, un grupo reducido de los ultras más radicales del Legia lanzó botellas a miembros de la Policía en la calle Rafael Salgado, zona de acceso a la grada reservada a la afición del equipo polaco en el estadio madridista.

La Policía cargó a caballo y con lanzamiento de pelotas para calmar una situación que no fue a más por la rápida intervención de las fuerzas del orden que se encargan de evitar cualquier altercado antes, durante y después de un partido de fútbol de alto riesgo por la violencia de los hinchas del Legia.

Tres policías y cinco ultras polacos resultaron heridos y tuvieron que ser atendidos con heridas leves. Uno de los aficionados, con la cabeza abierta, necesitó un collarín, mientras que otro sufrió una fractura en una mano, informaron a EFE fuentes del SAMUR.

Posteriormente, con el partido iniciado, cerca de 500 ultras sin entrada se quedaron fuera del estadio y volvieron a protagonizar nuevos altercados con la Policía, que pudo controlar a los aficionados del Legia Varsovia.

Ante la posible presencia de los ultras más violentos del equipo polaco, el estadio Santiago Bernabéu fue blindado para evitar cualquier tipo de incidente.

Hasta tres anillos policiales de protección alrededor del feudo madridista sirvieron para controlar a los radicales del Legia, de los más violentos de Europa.

La hinchada del club centroeuropeo es temida en todo el continente por su conocida violencia y ante el Borussia Dortmund alemán ya consiguieron burlar todas las medidas de seguridad en el Estadio del Ejercito Polaco.

Preocupación en Madrid por los ultras del Legia

Preocupación en Madrid por los ultras del Legia

Antes y durante ese partido utilizaron dentro del recinto cientos de bengalas y rociaron a la policía con gas pimienta.

Por eso, la UEFA sancionó al conjunto polaco con disputar el próximo encuentro a puerta cerrada. Y la alarma saltó en los siguientes clubes que tienen que recibir al Legia Varsovia en su estadio, entre ellos el Real Madrid.

Los efectivos que intentan evitar cualquier altercado en Madrid ascienden a 2.000, el doble que para un partido normal y 500 más que para un Real Madrid-Barcelona o un Real Madrid-Atlético de Madrid.

Las fuerzas de seguridad no han escatimado en medios y cerca del estadio Santiago Bernabéu se puede ver mucha Policía Nacional, Policía Municipal, perros policía y helicópteros que sobrevuelan una zona que ha sido revisada hasta en el subsuelo.

Hasta el alcantarillado ha pasado la inspección de los miembros de los cuerpos de seguridad.

En las filas de los ultras del Legia gobiernan los "Teddy Boys 95", el grupo cabecilla y más violento de todos los radicales del equipo polaco. Se declaran fascistas, homófobos, xenófobos, de extrema derecha y habitualmente protagonizan en su país peleas callejeras e incidentes en la grada.

La preocupación por la posible llegada de estos grupos alarmó al Real Madrid, que mandó al Legia Varsovia las 4.000 entradas que le exige la UEFA para el equipo rival y solicitó a la entidad polaca que no vendiera ninguna a sus hinchas más radicales.

Además, intentó evitar la venta por internet a cualquier tarjeta de crédito de procedencia polaca. Por eso, por la mañana, en los alrededores del estadio Santiago Bernabéu, se pudo ver a hinchas del Legia intentando comprar billetes en la reventa.