Con la premisa de romper la tendencia negativa de los últimos dos encuentros viaja el Leyma a Lleida para enfrentarse al equipo catalán. En el partido de la primera ronda jugado en Riazor, el conjunto de Gustavo Aranzana conseguía la victoria con una cómoda ventaja de 19 puntos por lo que refrendar aquel triunfo esta noche quitaría el mal sabor de boca que han dejado en los jugadores las derrotas ante Valladolid y Prat.

El técnico del equipo coruñés reconoce que en el último choque sus jugadores no dejaron una buena imagen, pero ya están preparados para una nueva batalla: "El equipo está con toda la motivación del mundo, ilusión y ganas de dar respuesta al mal partido que hicimos ante Prat y la mala imagen que dimos. Independientemente de que ellos ganaron merecidamente, nosotros estuvimos muy mal en algunos momentos. Queremos resarcirnos y hemos trabajado para no cometer los mismos errores. Tenemos ganas de vencer en Lleida y volver al camino de la victoria", comentó Gustavo Aranzana.

Borrar las dos últimas derrotas del Leyma Coruña será el objetivo a conseguir en Lleida esta noche ya que el componente psicológico es algo a lo que el entrenador del equipo coruñés da una vital importancia: "Las dinámicas siempre son importantes. Si son positivas se trabaja mejor, estás feliz y parece que todo te sale. Cuando son malas pierdes y la derrota te entristece y te fastidia, pero no me preocupa que el equipo esté fastidiado porque sería peor que no le diera importancia porque significaría que no tenemos corazón o que no hay compromiso y es todo lo contrario", analizó Gustavo.

"Estamos haciendo un globo demasiado fuerte por dos derrotas. Una en Valladolid donde han perdido equipos como Oviedo y la otra contra Prat que va segundo con 18 victorias porque nadie le ha regalado nada. Estamos fastidiados, no dimos buena imagen, hicimos dos primeros cuartos muy malos y eso es lo que hay que cambiar. No podemos estar todo el santo día pensando en el play off si vamos, si no vamos? Todo el mundo quiere ir y lo que hay que hacer es callar, ser positivo y trabajar al máximo. Al final a ver dónde llegamos", puntualizó Aranzana.

En el apartado de bajas está la ya conocida de Jonathan Gilling por las ventajas FIBA aunque el club está en contacto con la Federación danesa para intentar que el jugador se incorpore al equipo la misma tarde del partido ante Lleida. Y a ésta hay que sumar la duda de Jorge Sanz por un esguince.