El colegiado leonés mantuvo una línea seria como es habitual en él y acertó en casi todas las jugadas polémicas. Castigó las entradas duras y expulsó a Barragán por doble amonestación, quizá un poquito más tarde de lo que se había merecido el lateral. También se le podría reclamar un penalti a Luis Alberto a los tres minutos de partido, cuando fue arrrollado por Gayá en el área.