El anuncio del Deportivo de reservarse el derecho de admisión a Riazor con enseñas del Sporting, fuera de las cuatro zonas acotadas para los asturianos, ha frenado a la mareona. Las largas colas a primera hora del día -había gente desde las cinco de la mañana- para retirar las 1.127 entradas puestas a la venta se quedaron lejos de terminar el papel. Solo se agotaron las más baratas, restando todavía la mitad de ellas, 577, a un precio de 45 euros, que volverán a estar disponibles hoy, en El Molinón. Las críticas a las restricciones adoptadas en Riazor, que en Gijón se entienden como excesivas, caracterizaron una jornada con menor demanda de lo esperado, aunque se espera que durante estos días se agoten.