Guilherme completó ayer el entrenamiento junto al resto de sus compañeros en el regreso al trabajo tras la jornada de descanso concedida por el entrenador deportivista, Pepe Mel, pero el brasileño está todavía a la espera de recibir el alta médica. El centrocampista se entrenó con normalidad en la jornada con la que la plantilla comenzó a preparar el derbi frente al Celta del domingo en el estadio de Riazor (18.30 horas). Una lesión muscular impidió a Guilherme disputar los cuatro últimos compromisos del equipo (ante Atlético, Sporting, Betis y Barcelona) y podría regresar a las convocatorias en el encuentro de esta semana frente a los celestes. El brasileño, titular indiscutible hasta que se lesionó, encontrará ahora la competencia de Borges, Mosquera y Álex, recuperado en las alineaciones por Mel.